Facebook y Twitter han reabierto el interés por invertir en empresas web. Sin ir más lejos la última, sin un modelo de negocio constatable, levantó recientemente 100 millones de dólares de inversión. En Chile quizás nunca tendremos noticias rimbombantes como éstas, pues el capital no abunda (al menos eso se dice), y los inversionistas locales están lejos de apostar en negocios riesgosos.

 

Pese a esto, los emprendedores web chilenos se las han arreglado para instalar un pequeño ecosistema que ya cuenta con casos de éxito. “Mapocho Valley” fue el título de un artículo sobre un pionero grupo de empresas que se las ha ingeniado para hacer ruido y llamar la atención de los medios.

 

Los chilenos fayerwayer.com (blog de tecnología) o archdaily.com (blog de arquitectura) se han convertido en los más influyentes gracias a sus contenidos y lo profesional de su manejo, tanto así que son citados en todo el mundo y marcan pauta en sus áreas. Lo que partió como hobby se ha convertido en una oportunidad de influir en el mundo desde nuestro país, lo que nos llena de orgullo, pues nos damos cuenta de que podemos competir de igual a igual con países como Estados Unidos, India, China o Argentina.

 

El paso siguiente, y a la vez ambicioso, es crear empresas web globales desde Chile concebidas como tales desde un inicio. Los jóvenes de hoy están preparados para este desafío, pues mueven el capital, inversionistas y fondos que deben ser capaces de ver una opción tanto o más rentable en su portafolio tradicional de inversión, y como un rubro que se comporta de igual forma que una empresa tradicional.

 

Por ejemplo, autocenter.cl es una empresa chilena que vende autos por internet en todo el país, que se podría imaginar también como una fuerte inversión privada replicable en el mundo o al menos en nuestros países vecinos. ¿Por qué no hacer lo mismo con las casas o cualquier otro bien?

 

Las ventajas: un start up web (o comienzo de una web) nace global desde un inicio. No hay que expandirse en una etapa siguiente muy costosa y equivalente a partir de cero. Por otro lado, los estadounidenses no están interesados aún en invertir en la web de países angloparlantes.

 

Ejemplos de empresas jóvenes como éstas hay cientos por todo Chile, con mayor y menor grado de madurez. Pero muchas morirán por falta de inversión, y aunque no lo estamos haciendo, sabemos que son estos rubros, los innovadores y no los tradicionales, los que nos harán ser desarrollados más tempranamente.

 

Nuestros vecinos de Mercado Libre (Argentina) se tranzan hoy en Nasdaq por cerca de US$2.000 millones y BuscaPé (Brasil) se vende por US$342 millones, valor de alto impacto que crea gran cantidad de empleos con capital humano avanzado. ¡No sigamos perdiendo oportunidades en esta nueva economía que llegó para quedarse! Los jóvenes emprendedores ya están listos, tenemos el incentivo a la inversión necesario y la infraestructura y capital humano de sustento adecuados, sólo falta un poco más de riesgo y visión de ángeles, inversionistas y fondos que transformen a Chile rápidamente en líderes de la web. Estoy seguro que quienes agilicen el capital invirtiendo en este rubro serán pronta y fuertemente recompensados