Programa de Innovación Tecnológica (1996-2000)

FIA:
FUNDACIÓN PARA LA INNOVACIÓN AGRARIA

La Fundación para la Innovación Agraria, creada el año 1981 por el Ministerio de Agricultura, es un organismo autónomo que funciona como corporación de derecho privado. Su misión es impulsar y coordinar las acciones de desarrollo científico-tecnológico orientadas a incorporar innovación en los procesos productivos y de transferencia en los sectores agrícola, agroindustrial, forestal y ganadero. Para el cumplimiento de este objetivo, la FIA financia iniciativas, programas o proyectos de innovación tecnológica e investigación, promoviendo la introducción de nuevas tecnologías que permitan aumentar la productividad y la competitividad de la agricultura del país.

En este sentido, la FIA impulsa proyectos de interés nacional y/o regional en las áreas agrícola, agroindustrial, forestal, pecuaria y acuícola.

La FIA estimula la ejecución de proyectos de innovación e investigación, mediante financiamiento parcial otorgado a los agentes que emprenden estas tareas en el área agrícola y forestal, ya sean éstos entidades públicas o privadas, empresas o personas naturales o jurídicas, de forma individual o colectiva.

Entre los principales ejecutores de los proyectos se encuentran los siguientes:

  • Universidades

  • Institutos de investigación y desarrollo: Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA), Instituto de Desarrollo Agropecuario (INDAP), Instituto Tecnológico de Chile (INTEC-Chile) y el Instituto Forestal (INFOR), entre otros.

  • Empresas agrícolas, agrupaciones de productores agrícolas y consultores privados.

Los recursos de la FIA provienen fundamentalmente del presupuesto anual de la nación y, en menor medida, de aportes del sector privado. Mediante la confluencia de recursos públicos y privados, se busca estimular el compromiso del sector empresarial, productivo y comercial, para así garantizar la efectiva materialización de los proyectos y, al mismo tiempo, asegurar su rentabilidad futura.

Las tareas de dirección y administración de la FIA son ejercidas por el Consejo Directivo (presidido por el Ministro de Agricultura) y la Dirección Ejecutiva, quienes tienen la misión de elegir, entre los proyectos presentados, aquellos que serán financiados. Las dos modalidades de acceso a los fondos de la FIA son: ventanilla abierta y licitaciones.

De esta manera, los proyectos financiados por la fundación, tanto de innovación como de investigación, se enmarcan en cuatro áreas fundamentales:

  • Área Agrícola

  • Área Forestal

  • Área Pecuaria

  • Área Acuícola

Dentro de estas líneas, los proyectos pueden cubrir aspectos productivos, de procesamiento industrial, de comercialización o de investigación de mercados.

En marzo de 1995, el Ministerio de Agricultura dio a conocer un conjunto de medidas de apoyo a la transformación del sector y para el mejoramiento de las condiciones de vida de la población rural del país. Entre las iniciativas anunciadas, se incluyen dos programas encargados a la FIA: "Programa de Capturas de Tecnologías" y "Programa Nacional de Biotecnología".

El principal objetivo del primero de éstos consiste en fomentar el uso del conocimiento disponible, a través de la captura de tecnologías presentes en el país y en el extranjero, que contribuyan a optimizar los procesos productivos de la agricultura, para difundirlas en Chile y adaptarlas cuando sea necesario. En este sentido, el programa está orientado a incrementar los vínculos entre empresas, investigadores, productores, profesionales y técnicos del sector agrario, con la misión de incorporar innovaciones tecnológicas en la producción, transformación y comercio de productos agrícolas y forestales.

El Programa Nacional de Biotecnología, en tanto, se constituye en respuesta a la importancia prioritaria que le atribuya al tema el Ministerio de Agricultura. De esta manera, y con el apoyo de la FAO, se realizó un diagnóstico base de la situación de la biotecnología vegetal en Chile. Posteriormente, un grupo de expertos internacionales visitó el país, a fin de analizar la situación nacional en materia de biotecnología y de proponer sus recomendaciones para la formulación del Programa Nacional de Biotecnología Forestal y Agropecuaria.

TIPIFICACIÓN DE LA FIBRA DE CAMÉLIDOS

El principal objetivo del proyecto fue tipificar y comparar la fibra proveniente de las cuatro especies de camélidos sudamericanos: llamas, alpacas, guanacos y vicuñas. Además, se estudió los factores fisiológicos, de manejo y las variables económicas involucradas en el desarrollo de sistemas ganaderos basados en estas especies.

Se efectuó un estudio a nivel nacional, aplicando las técnicas estándares de evaluación lanimétrica. Para ello, se recolectaron muestras de ejemplares domésticos provenientes de rebaños de las zonas altiplánica, central y austral. También se analizaron muestras de fibras de vicuñas procedentes del medio silvestre (altiplánico) y de guanacos del medio silvestre y de criaderos (zona austral).

A través de este estudio, realizado por la Universidad Católica, se determinaron las siguientes características físicas: diámetro de fibra, porcentaje de medulación, porcentaje de pelos de la muestra y diámetro de los mismos.

Se concluyó que existen diferencias estadísticamente significativas entre alpacas, llamas, vicuñas y guanacos, en relación a las características físicas señaladas.

Una de las observaciones más importantes recabadas por el proyecto fue la comprobación de que, a mayor nivel nutritivo, el porcentaje de medulación aumenta, pero los otros factores estudiados no se ven afectados (finura).

INTRODUCCIÓN DE NUEVAS ESPECIES DE HONGOS COMESTIBLES

El proyecto, realizado por la empresa DECOFRUT Ltda., identificó las especies y variedades de hongos comestibles que se consumen en los mercados de Norteamérica, Europa y Asia, susceptibles de introducirse en Chile para su producción y exportación. Además, determinó el nivel productivo y tecnológico de esta actividad en el país y la situación de mercado de las principales especies de consumo humano.

El estudio concluyó que el país presenta un gran potencial para la producción de hongos, tanto de especies silvestres como cultivadas.

De las especies silvestres presentes en Chile, las de mayor valor en el mercado son Boletus luteus y Lactarius deliciosus. Sin embargo, se hace necesario mejorar las técnicas de recolección y de procesamiento para lograr un producto final de mayor calidad.

El estudio también recomendó analizar la posibilidad de introducir otras especies silvestres de mayor valor en el mercado internacional que las existentes en Chile, tales como Boletus edulis, Cantharellus cibarius y Morchella esculenta.

En cuanto a la producción de hongos cultivados, la investigación concluyó que es necesario elevar los rendimientos para hacer más competitiva esta industria, a través de la optimización de los aspectos susceptibles de mejorar.

El Shiitake (Lentinus edodes) sería la especie con mayor potencial para la producción cultivada, por los altos precios que alcanza en los mercados internacionales, por la diversidad de destinos donde es apreciado y porque la técnica de su producción es razonablemente sencilla.

Finalmente, el estudio concluyó que -a condición de diversificar las especies y mejorar el producto final- las exportaciones de hongos presentan atractivas posibilidades en los mercados europeos, norteamericanos y asiáticos, en este último caso, particularmente en Japón y Hong Kong.