1. EL ESTUDIO ENCARGADO

El presente estudio exploratorio se enmarca en el contexto de un esfuerzo del Programa de Innovación Tecnológica del Ministerio de Economía para conocer el aporte real que han hecho los Fondos Tecnológicos , a través de los proyectos que financian, al tema de las tecnologías ambientales, con el fin de detectar  fortalezas y debilidades del estado actual de las capacidades tecnológicas para encarar el tema. 

Para llevar a cabo la tarea mencionada, el Programa de Innovación Tecnológica contrató a la empresa consultora Gestión Ambiental Consultores. 

? La tarea se realizó generando, en primer lugar, un marco conceptual sobre el tema ambiental, el cual -combinando el conocimiento actual y las políticas ambientales enunciadas por el gobierno- propone categorías de análisis y precisión de conceptos operativos. A partir de este marco conceptual se elaboró una taxonomía que permitió ubicar los proyectos según su aporte al tema ambiental. 

? En seguida, se aplicó la taxonomía desarrollada a un conjunto de más de 1.000 proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos, utilizando el título del proyecto como único descriptor del contenido ambiental del mismo. 

? Una vez revisado el universo de proyectos financiados por el PIT, se seleccionaron los proyectos definidos (de acuerdo al marco conceptual) como ambientales. Cuando se obtuvo este nuevo listado, de éste se seleccionó un grupo de 30 proyectos a los que se les realizó un análisis en profundidad, aplicando una encuesta tanto a los encargados de proyectos como a sus contrapartes en los Fondos. 

Como puede desprenderse de este breve listado de acciones, existen limitaciones metodológicas que explican el apelativo de exploratorio que se le da a este estudio. Dichas limitaciones  provienen de tres frentes. La primera de ellas está referida al elevado número de proyectos objeto de este estudio. En efecto, se trata del análisis de 1.140 proyectos, que se han ingresado a una base de datos en la que consta el título de los mismos, el Fondo que los ha financiado y el año de aprobación. El segundo frente de limitaciones se refiere a los plazos para la realización del estudio, los que deben ser compatibles con los objetivos del estudio y las necesidades de información que deben cubrirse. El tercer frente de limitaciones metodológicas proviene de la falta de información respecto de los proyectos listados, ya que no se cuenta con los proyectos presentados a concurso, ni con sus informes finales, ni con un resumen ejecutivo de los mismos. 

En este contexto, el objetivo del estudio es evaluar la consistencia que existe entre los tipos de proyectos desarrollados y las políticas públicas que se han establecido en torno al tema ambiental, en términos de las prioridades, modernidad de los enfoques y la temática específica de cada área. 
 

2. MARCO CONCEPTUAL

Antes de analizar el aporte real que han hecho los Fondos Tecnológicos -a través de los proyectos que financian- al tema de las tecnologías ambientales, y a fin de detectar fortalezas y debilidades del estado actual de las capacidades tecnológicas para encarar el tema, es necesario, en primer lugar, definir y limitar el objeto principal de análisis. Es decir, reconocer - para efectos de este trabajo- qué se entenderá por medio ambiente. 

La Ley de Bases del Medio Ambiente (Ley 19.300) define medio ambiente como: "(...) el sistema global constituido por elementos naturales y artificiales de naturaleza física, química o biológica, socioculturales y sus interacciones, en permanente modificación por la acción humana o natural y que rige y condiciona la existencia y desarrollo de la vida en sus múltiples manifestaciones". 

Esta definición es bastante completa y da una cierta idea de la complejidad estructural y dinámica del tema, pero, desde el punto de vista de la operatividad, no entrega un elemento concreto sobre el que orientar el estudio. Así, teniendo a la vista el texto de la citada ley, se hizo necesario generar una definición operativa de medio ambiente en la forma de un marco concreto de análisis que facilitara la selección y sistematización del estudio. 

En ese sentido, se puede reconocer: 

a) El sistema global, que si bien desde un punto de vista teórico es la totalidad del planeta, en la práctica queda circunscrito a un área mucho más reducida, donde las acciones emprendidas producen un efecto más o menos visible: es decir, lo que usualmente se conoce como área de influencia del proyecto, que, dependiendo del tipo de proyecto o acción, puede ser un área geográfica, económica y/o política; 

b) Elementos naturales de naturaleza física, química o biológica: los llamados recursos naturales, renovables o no renovables,  son la fuente de sustento, bienestar y permanencia de las actividades humanas, y que por lo mismo, son objeto permanente de extracciones, modificaciones, alteraciones, decrementos y/o mejoras; 

c) Elementos socioculturales, que son las costumbres, procedimientos o mecanismos a través de los cuales el hombre se relaciona con los elementos naturales y consigo mismo, y que determinan las necesidades de utilización o mantención de los mismos; 

d) Elementos artificiales de naturaleza física, química o biológica ,  constituyen el producto de la transformación que los elementos socioculturales hacen de los elementos naturales; y

e) Interacciones,  entre las que se pueden reconocer diferentes niveles y alcances:

i) las que ocurren entre los elementos naturales y que constituyen los procesos ecosistémicos, mediante los cuales se logra la permanencia o evolución de los organismos, poblaciones y comunidades. 

 ii) la relación mediante la cual los elementos naturales generan bienestar en los elementos socioculturales (sombra, calor, agua, estética, etc.). 

 iii) las modificaciones que los elementos socioculturales ejercen sobre los elementos naturales a través del consumo y transformación de éstos, así como la incorporación de elementos artificiales sobre el medio natural. 

 iv) las relaciones internas de los elementos socioculturales que determinan las demandas hacia los elementos naturales y la forma de acceder a ellos (la creación del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental es un ejemplo de ello). 

Puede pensarse el medio ambiente como una serie de elementos y relaciones, originalmente naturales y luego naturales y artificiales, en permanente modificación por parte de elementos socioeconómicos que aspiran a conseguir su crecimiento y bienestar. 

Sin embargo, la posibilidad y grado de inserción de los diferentes elementos y relaciones dentro del concepto sufre variaciones más o menos marcadas según la filosofía o corriente de pensamiento de que se trate, disyunción que constituye una de las principales relaciones dentro de los elementos socioeconómicos. 

Así, por ejemplo, un segmento de la población de filosofía ambientalista dura considerará el medio ambiente exclusivamente como los elementos naturales y sus relaciones, donde el hombre sólo cabe en su rol de primitivo cazador recolector (un consumidor primario o secundario en la cadena trófica original) que actualmente se encuentra fuera del medio ambiente, por lo que las actuales intervenciones del hombre sobre el medio natural no son modificaciones, sino una eliminación del medio ambiente. 

En el extremo opuesto, y desde una filosofía ultra desarrollista, los elementos naturales son solamente la fuente generadora de bienes y la alteración de ellos o de sus relaciones constituyen el costo necesario de asumir para conseguir el bienestar humano. 

En medio de estos dos polos, existen también otras concepciones del medio ambiente. 

Con todo, la percepción general creciente es que las relaciones de los elementos socioeconómicos y sus obras (elementos artificiales) con los elementos naturales y sus relaciones sistémicas son cada día más estrechas, en el sentido que condicionan fuertemente la calidad de vida del hombre, relación que -proyectada hacia el futuro- se vislumbra aún más estrecha. Ello ha movido a los elementos socioculturales a establecer mecanismos o procedimientos tendientes a armonizar sus relaciones con el medio natural. El sólo hecho que un cuerpo legal se ocupe, entre otras cosas, de definir medio ambiente, o la creación y puesta en marcha del SEIA, son  claros ejemplos de ello. 

En definitiva, y tratándose de sistematizar el análisis del efecto que una acción o proyecto tiene sobre el medio ambiente, es necesario considerar, en primer lugar,  que el principal objetivo de la gestión ambiental, definido por los elementos socioculturales, es -como se dijo anteriormente- asegurar y elevar la calidad de vida del hombre, tendiendo a que este proceso sea de rápida y creciente generación. 

La gestión ambiental es un concepto de reciente explicitación en las políticas de públicas,  pero,  sin embargo, ha estado presente de manera implícita desde el momento en que la Constitución aborda el tema medioambiental como un deber del Estado. 

En este marco, y si bien la política ambiental no ha sido aún plasmada en un documento programático que defina objetivos, estrategias y mecanismos de gestión, los intentos de sistematización han logrado establecer ciertos principios de política que -refrendamos en la Ley 19.300 sobre Bases Generales del Medio Ambiente- se refieren a la gradualidad y el realismo con que la gestión ambiental ha de implementarse; a la prevención del deterioro ambiental; a que quien contamina paga; a la responsabilidad por el daño ambiental; a la eficiencia de la gestión ambiental del gobierno; y a la participación ciudadana. 

En la línea de estos principios, la agenda ambiental del gobierno contiene, entre otros programas, la inclusión efectiva de los componentes ambientales en los programas de actividad de los ministerios; la valorización de los recursos naturales; y la adecuación del sector industrial y de las tecnologías utilizadas de acuerdo a la demanda de los consumidores y de la ciudadanía. 

Asimismo, se han establecido bases de políticas ambientales sectoriales en el Control de la Contaminación Atmosférica; en el Uso Sustentable de los Recursos Hídricos; en el Manejo Adecuado de Residuos Sólidos; en el Uso Sustentable y la Protección de los Recursos Naturales (pesca, forestal, conservación de suelos y biodiversidad); y la Protección del Hábitat Urbano. Para el cumplimiento de los objetivos de la política, n todas y cada una de estas bases subyace -explícita o implícitamente- la colaboración entre el Estado y el sector privado, el desarrollo permanente de investigación y el mejoramiento tecnológico. 

No obstante lo anterior, la gestación de muchos de los proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos ha ocurrido fuera de una concepción de gestión ambiental, por lo que no han incorporado la variable ambiental en sus diseños y/o ejecución. Después de la adjudicación de recursos para alrededor de mil proyectos, se hace necesario evaluar la consistencia que existe entre los tipos de proyectos desarrollados (financiados por los Fondos Tecnológicos) y las políticas públicas que se han establecido respecto del medio ambiente.

3. CRITERIOS DE SELECCIÓN DE PROYECTOS DE LOS FONDOS TECNOLÓGICOS DE ACUERDO A SU APORTE REAL AL TEMA DE LAS TECNOLOGÍAS AMBIENTALES

En este capítulo se presentan los criterios utilizados para seleccionar, del total de proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos, un subconjunto denominado "proyectos ambientales". 

Primer Criterio:

Se seleccionaron proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos utilizando un criterio de afinidad conceptual con el siguiente listado de políticas, hayan o no sido enunciadas explícitamente por la autoridad ambiental:

1.- Control de la contaminación atmosférica
2.- Uso sustentable de los recursos hídricos
3.- Manejo adecuado de los residuos sólidos
4.- Uso sustentable y protección de los recursos naturales
5.- Protección del hábitat urbano
6.- Fortalecimiento Institucional para la gestión ambiental
La idea aquí es revisar los proyectos listados a partir de su título y evaluar si se inscriben o no en alguno de los ámbitos definidos a priori como ambientales. La evaluación se realizará utilizando el juicio de expertos, a fin de producir una selección gruesa que separe el subconjunto ‘ambiental’ del gran conjunto de proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos, los cuales pertenecen a diferentes ámbitos del quehacer tecnológico nacional. La aplicación de este criterio da lugar a un subconjunto denominado "Proyectos con Componentes Ambientales". 

Segundo Criterio:

A partir de ocho indicadores de gestión ambiental se clasifican proyectos del subconjunto denominado "Proyectos con Componentes Ambientales", obtenido a partir de la aplicación del criterio anterior. 

Los indicadores de gestión ambiental son del tipo siguiente:

1.- Uso de tecnologías limpias
2.- Incentivo al uso de reciclaje, reutilización y reducción en origen
3.- Gestión de comando y control
4.- Uso de tecnologías "end of pipe"
5.- Uso de información en redes para la toma de decisiones
6.- Uso de información centralizada para la toma de decisiones
7.- Uso de instrumentos económicos para la gestión ambiental
8.- Tipo de Fiscalización
En esta fase se realizó una aproximación fina al verdadero aporte de los Fondos Tecnológicos a la gestión ambiental. La clasificación busca mostrar algún tipo de tendencia en cuanto a la modernidad de los enfoques y aportes de los Fondos, ya que enfoques apegados a tecnologías end of pipe o comando y control mostrarán enfoques más antiguos, mientras que gestiones que incentivan el uso de tecnologías limpias o el reciclaje, serán percibidas como más modernas. En los casos en que se aplicó más de un criterio, se asignó el proyecto a aquel descriptor que con mayor frecuencia se menciona por el proyecto. La aplicación de este criterio dio lugar a grupos de proyectos excluyentes entre sí. 

Para operacionalizar esta tarea, se utilizó la siguiente matriz de indicadores clave de "modernidad y pertinencia con políticas públicas vigentes" de la gestión para cada componente ambiental identificado.


Tercer Criterio:

Una vez identificados los proyectos ambientales del conjunto de proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos, y ordenados en cuanto a su importancia desde el punto de vista de la modernidad de su enfoque de gestión, se realizó una revisión de treinta proyectos aplicando dos indicadores: 

  • El primero, referido a la escala temporal en la que actúa o tendrá efecto el proyecto (corto, mediano y largo plazo); y 
  • El segundo, de acuerdo a la modalidad del efecto ambiental que produce (directo o indirecto).
La utilización de este criterio en una selección de 30 proyectos que cumplen con el criterio 1 y 2, es decir, proyectos ambientales que entregan información relevante a la gestión ambiental, permitió aproximarse de una manera más certera a la pregunta base de este estudio, esto es, ¿cuál ha sido el aporte real que han hecho los Fondos Tecnológicos al tema de las tecnologías ambientales?. Así,  por medio de una exploración más profunda al interior de los proyectos, y ya no a través de una mera revisión de títulos, se indagó en la consistencia entre proyectos y políticas públicas en materia ambiental. 

La idea fue generar un listado en el que se situarían los proyectos de acuerdo a su importancia, determinada por la siguiente matriz:

De esta manera, los proyectos que se ubiquen en las casillas sombreadas de la matriz, serán considerados como los que mayor consistencia tienen con las políticas públicas ambientales vigentes en la actualidad. El raciocinio detrás de esta clasificación proviene del supuesto que la calidad ambiental del país requiere de la implementación de los proyectos a la brevedad, y que la tardanza en implementarlos o  que rindan frutos, perjudica o demora, al menos, una gestión ambiental necesaria y pertinente. 

Se define como de corto plazo a aquellos proyectos que se implementan en menos de un año; de mediano plazo a aquellos que se implementarán en más de 1 año y menos de 5 años; y de largo plazo a aquellos que se implementarán o rendirán resultados en más de 5 años. 

Los efectos directos se considera que ocurren cuando, como producto inmediato del proyecto, se obtiene un resultado ambiental. Por el contrario, un efecto indirecto se presume cuando el proyecto en cuestión genera o desarrolla las condiciones, la tecnología o la institucionalidad para que un efecto directo tenga lugar. 

4. RESULTADOS

4.1. Introducción

De acuerdo a lo planteado en la introducción, se entrega aquí el resultado de la selección de proyectos de los Fondos Tecnológicos de acuerdo a su aporte real al tema de las tecnologías ambientales. La operación de los criterios ha permitido, como se puede ver en las tablas adjuntas (tablas 1 y 2), la designación clara de 155 proyectos como "Proyectos Ambientales", y otros 15 proyectos, que resultan buenos candidatos a proyectos ambientales, pero, a partir de la información sucinta del título y de una discusión preliminar con los administradores de los Fondos, no se logra despejar si cumplen con los criterios para designarlos como ambientales y, por lo tanto, se requiere un mayor análisis para asignarlos como tales. Finalmente, los restantes 973, de acuerdo a los criterios propuestos en el capítulo 2, no aparecen como "Proyectos Ambientales".

Adicionalmente, después de la aplicación de los criterios, se puede observar que existen categorías vacías, donde no es posible incluir proyectos (Control de la Contaminación Atmosférica por tipo de Fiscalización y Protección del Hábitat Urbano). Se podría argüir que esto se debería a que la definición de categorías fue excesivamente fina y, por lo tanto, ,se generaron categorías no naturales. Alternativamente, se podría deber a una real carencia de proyectos en las áreas mencionadas, dado el nivel de desarrollo de la gestión ambiental en Chile. En relación a la primera alternativa, se podría descartar si se observa el número y tipo de proyectos financiados tanto por la cooperación internacional como por fondos públicos en la Región Metropolitana dirigidos a instaurar o mejorar la fiscalización de la contaminación atmosférica. En lo que se refiere a la Protección del Hábitat Urbano, la tendencia hoy día en boga por la autoridad ambiental es utilizar los instrumentos de planificación territorial para evitar el daño ambiental de las actividades productivas y los servicios en las áreas urbanas. Así las cosas, no cabe más que aceptar una carencia dramática de proyectos en las áreas ya nombradas por razones cuya profundización escapan al objetivo de este estudio. 

Asimismo, puede verse un incremento de categorías en relación a lo previsto en la introducción (Forestal, Pesquero, Minero, Agrícola y Fortalecimiento Institucional), las que surgen de una segunda ronda de revisión tanto con la contraparte del Ministerio de Economía como de la rotación de los listados al interior de Gestión Ambiental Consultores. 

4.2. Análisis General 

4.2.1. Clasificación de los Proyectos Ambientales

La categoría Fortalecimiento Institucional se refiere a un grupo importante de proyectos, cuya ejecución cumple un rol de mejoramiento de las condiciones para el desarrollo de iniciativas ambientales en todos los otros ámbitos identificados. Allí se agrupan proyectos de mejoramiento de laboratorios, capacitación, certificación de procedimientos, etc., llegando a un total de 37 proyectos. 

Las áreas de contaminación atmosférica presentan muy pocos proyectos (6 en total). En el caso del área "Control de la contaminación atmosférica por tipo de fiscalización", no fue posible identificar ningún proyecto. 

En el caso del área "Protección del hábitat urbano", tampoco fue posible identificar ningún proyecto. 

Las áreas que más proyectos concentran, son: "Fortalecimiento institucional", con 37 proyectos; "Uso sustentable de los recursos hídricos", con 24 proyectos;  y "Manejo adecuado de los residuos sólidos", con 20 proyectos. 

Adicionalmente, se ha desagregado la categoría "Uso Sustentable de los Recursos Naturales", abriéndola en cinco categorías, a saber: Forestal (25), Pesquera (15), Minera (7), Agrícola (14) y Uso Sustentable de los Recursos Naturales (11), propiamente tal. Esta última se ha mantenido porque existen proyectos transversales no asignables claramente a una de las categorías anteriores. 

En el área forestal se han identificado 21 proyectos, agrupados mayoritariamente en las categorías Avanzada y Normal (10 y 8 proyectos, respectivamente), con un proyecto en la categoría Punta y cuatro en la Básica. 

En el área pesquera se han identificado un total de 15 proyectos, agrupados mayoritariamente en las categoría Avanzada, con 12 proyectos, mientras que en el área Normal se agrupan los restantes tres. 

En el área minera se han identificado sólo 7 proyectos, agrupados en las categorías Avanzada y Normal (4 y 3 proyectos, respectivamente). 

En el área agrícola se han identificado 14 proyectos, agrupados mayoritariamente en la categoría Normal (9 proyectos), con tres proyectos en la categoría Avanzada y uno en la Básica. 

Las tablas que operacionalizan los indicadores clave de "modernidad y pertinencia con políticas públicas vigentes" de la gestión para cada componente ambiental identificado, se han ampliado y modificado de acuerdo al mayor desarrollo conceptual alcanzado en esta fase de la consultoría. 

En el anexo 1 se entrega el cuestionario enviado a los representantes de los Fondos Tecnológicos para dilucidar los proyectos que serán evaluados de manera exhaustiva, de acuerdo a los términos de referencia. 

4.2.2. Evaluación de los Proyectos de Acuerdo a su Efecto  y a su Contingencia o Plazo de Ejecución 

El análisis de los proyectos seleccionados (155), desde el punto de vista del tercer criterio enunciado en el punto 2 de este informe final,  se muestra en las tablas 5 y 6. 

Como se puede observar, más del 70% de los proyectos pueden sindicarse como de efecto directo sobre la calidad ambiental del país, expresándose su aporte en el mediano plazo (50% del total). Por otra parte, los restantes proyectos, de efecto indirecto, también concentran, coincidentemente (en un 70 %), sus aportes en el mediano plazo. No se detectaron proyectos de efecto indirecto en el corto plazo. 

4.3. Aplicación de Encuesta a 30 Proyectos Seleccionados

De acuerdo a los términos de referencia,  se seleccionaron 30 proyectos del total de proyectos considerados como ambientales. En conjunto con la contraparte técnica, se diseñó una encuesta para evaluar aspectos de impacto, replicabilidad, origen de las tecnologías, valor agregado por los agentes nacionales, difusión, externalidades y oportunidades que se abren. Dicha encuesta se distribuyó entre los jefes o encargados de los proyectos seleccionados, a fin de que la contestaran de la manera más precisa posible. 

La encuesta pretendía evaluar o detectar, de manera general y complementaria, si los Fondos:

  • actúan con un criterio de selección que privilegia proyectos con algún componente ambiental
  • han detectado impactos ambientales en los proyectos
  • han detectado algún nivel de replicabilidad en los proyectos financiados por el Fondo
  • han generado tecnologías o know-how ambiental en los proyectos financiados por el Fondo
  • ha habido valor agregado nacional en materias ambientales
  • ha habido difusión de los aportes del proyecto
  • ha habido externalidades ambientales en los proyectos financiados por el Fondo

  • ha habido un efecto de arrastre por parte de proyectos ambientales hacia otras áreas de desarrollo


5. ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS

5.1. Por Categorías de Proyecto 

5.1.1. Control de la Contaminación Atmosférica

En esta categoría se agrupa un número pequeño de proyectos (6), que corresponde a menos del 4% de los proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos. Llama la atención una cifra tan baja, por cuanto el problema de la contaminación atmosférica aparece recurrentemente como uno de los problemas que más preocupa a los ciudadanos, y que concita el mayor número de citas de prensa y esfuerzos de política del gobierno. En consideración a este supuesto, esta categoría se abrió, a priori, en función de tres maneras de entender el tema de la Contaminación Atmosférica: 

  • Por tipo de contaminante
  • Por tipo de fiscalización
  • Por tipo de instrumento de gestión
Más adelante se da cuenta de cada una de las categorías en las cuales se subdividió la categoría inicial. 

5.1.1.1. Control de la Contaminación Atmosférica por Tipo de Contaminante Controlado

Esta categoría está inmersa en el ámbito "Control de la Contaminación Atmosférica". La revisión detallada de los proyectos financiados con los aportes de los Fondos arrojó que sólo un proyecto (N° 1020) se podía encasillar en la categoría denominada como "Avanzada", esto es, está relacionado con el control de contaminantes secundarios, en este caso, olores provenientes de la industria pesquera. Otros tres proyectos (N° 844, 891 y 1045) han sido asignados a la categoría "Normal", ya que dan cuenta del control de contaminantes atmosféricos que hoy día en Chile se controlan habitualmente. De estos datos se puede observar que no se han identificado proyectos financiados por los Fondos Tecnológicos que se pueden asociar a un nivel de desarrollo tecnológico de punta, esto es, que se hayan dedicado al control de tóxicos específicos. Por otra parte, tampoco se identificaron proyectos en los cuales haya habido ausencia de control de contaminantes atmosféricos. Desde otra perspectiva, se puede observar que los cuatro proyectos fueron financiados por el FONTEC. Este panorama permite visualizar que aunque a nivel de la autoridad ambiental ya se discute, y en algunos casos ya se aplican medidas de control de tóxicos específicos y COV's, el tema no ha llegado a los Fondos Tecnológicos más que al nivel descrito más arriba. 

5.1.1.2. Control de la Contaminación Atmosférica por Tipo de Fiscalización 

No existen proyectos en esta categoría. Este tema es hoy día uno de los más relevantes en materia de control de la contaminación. De la implementación de sistemas adecuados de control y fiscalización depende en una alta proporción la efectividad de los planes de descontaminación y prevención que la autoridad ambiental está iniciando. Llama la atención que no existan proyectos financiados en esta área. Se podría hipotetizar que las empresas involucradas en los planes aludidos están accediendo a la tecnología de este tipo por paquetes asociados a los equipos de producción, con lo cual no se ha requerido de apoyo de los Fondos. 

5.1.1.3. Control de la Contaminación Atmosférica por Instrumentos de Gestión

En esta categoría existen sólo dos proyectos concentrados en el nivel de tecnología "Normal" (N° 21 y 201), el primero financiado por el FDI, y el segundo por FONDEF. Resulta interesante comprobar que la generación de normativa de carácter ambiental, una de las carencias del sistema chileno de gestión ambiental, se está realizando con el apoyo directo de los Fondos. Por otra parte, se debe destacar la ausencia de proyectos en niveles más modernos o avanzados, produciéndose un desfase tecnológico, a nivel de proyectos, entre las categorías que aluden al tipo de contaminante controlado y el tipo de instrumento de gestión aplicado para dicho control. 

5.1.2. Uso Sustentable de los Recursos Hídricos

Se trata de una de las categorías más pobladas de proyectos, aunque concentrada, prácticamente, en sólo dos niveles tecnológicos. En efecto, el nivel "Avanzado" agrupa 11 proyectos (10 de ellos financiados por el FONTEC y sólo uno por el FONDEF), mientras que el nivel "Normal" agrupa 12 proyectos (6 FONDEF, 1 FDI, 1 FONTEC y el resto FMI). Esta categoría agrupa  proyectos que buscan solucionar uno de los problemas ambientales más relevantes hoy día en Chile, cual es el tratamiento de las aguas residuales, tanto domésticas como industriales. En conjunto con la  categoría "Manejo Adecuado de los Residuos Sólidos",  agrupa el 28% del total de los proyectos y el 48% de los proyectos del área de contaminación. Cuatro de los proyectos del nivel "Normal" han sido financiados por el FMI y están relacionados con los esfuerzos nacionales para estudiar los efectos del cobre sobre la salud humana, enmarcados, a su vez,  en el contexto de documentar la posición chilena en el tema del  cobre en el agua. 

Resulta interesante comprobar que existe un numero importante de proyectos en el nivel avanzado que estudian tratamientos novedosos para problemas ambientales de larga data en nuestro país (tratamiento de aguas en el sector pesquero). 

5.1.3. Manejo Adecuado de los Residuos Sólidos

Esta categoría agrupa 20 proyectos, prácticamente todos ubicados en el nivel avanzado (excepto el N° 40, que sitúa en el nivel punta), particularmente concentrados en la recuperación y valorización de residuos sólidos. La mayoría de los proyectos fueron financiados por el FONTEC (15), aunque el FONDEF (4) y el FDI (1) también están presentes. La gran agrupación de proyectos en esta categoría contrasta con la baja presencia de proyectos en la categoría de Contaminación Atmosférica. A pesar de lo preliminar de estos análisis, se podría argüir que la problemática de los residuos sólidos tiene una componente privada, de escala local, en lo que a planteamiento de soluciones se refiere, situación que la problemática atmosférica pareciera no tener o tener en menor grado. Esta podría ser la razón de encontrarse con muchos más proyectos en las categorías de recursos hídricos y residuos sólidos que en la de contaminación atmosférica. 

5.1.4. Uso Sustentable y Protección de los Recursos Naturales 

Esta categoría agrupa  11 proyectos (distribuidos de manera equitativa entre los Fondos FDI, FIA y FONTEC). Ocho de los once proyectos se concentran en la categoría normal, esto es, "Establecimiento de Parques y Reservas y Uso de la Información para la Toma de Decisiones". Los tres restantes en la categoría básica, vale decir, "Introducción de Especies". Estos proyectos se refieren, según la definición de categorías usada, a aquellos proyectos que no son asignables a uno de los sectores típicos en los que se dividen los recursos naturales (Forestal, Pesquero, Minero y Agrícola), sino más bien a áreas comunes que son transversales a la gestión de estos recursos. 

5.1.5. Sector Forestal

Esta categoría agrupa  25 proyectos, lo que representa el 35% de los proyectos del área de recursos naturales. Existen proyectos en los cuatro niveles tecnológicos, siendo el más nutrido el nivel "Avanzado" con 10 proyectos, seguido por el "Normal" con ocho, el "Básico" con cuatro y el "Punta" con tres. En cuanto a los Fondos, los cuatro están representados en la categoría, siendo el FDI y FONTEC los que financian la mayor cantidad de proyectos (10 y 9, respectivamente), seguidos por el FONDEF (4) y el FIA (2). Esta categoría agrupa a muchos proyectos de Institutos CORFO como el CIREN y el INFOR, los que han financiado sus actividades a partir de estos proyectos. 

5.1.6. Sector Pesquero 

Se trata de 15 proyectos agrupados en dos niveles tecnológicos (11 en Avanzado y 4 en Normal). Esta categoría agrupa a algunos proyectos que alivian la presión sobre los recursos pesqueros a través de la re-introducción de especies y la optimización de procesos de producción. Adicionalmente, se incluyen proyectos que mejoran el nivel de información existente en el sector y que permiten una mejor gestión ambiental del mismo. Todos los Fondos están representados, siendo FONDEF y FONTEC con seis proyectos cada uno los que financian más proyectos en la categoría. 

5.1.7. Sector Minero

Se trata de un pequeño grupo de siete proyectos financiados por el FIM (2), el FONDEF (4) y el FDI (1), agrupados en las dos categorías intermedias Avanzada (4) y Normal (3). Se trata de proyectos que buscan desarrollar técnicas de reutilización de desechos de la minería, de desarrollo de proceso no contaminantes y de evaluación de efectos del cobre en la salud humana. 

5.1.8. Sector Agrícola

En esta categoría se han agrupado proyectos del sector agropecuario que involucran mejoras ambientales de la producción agrícola a través del mejoramiento de la información, el desarrollo de técnicas para el combate de la erosión y la adaptación de cultivos a condiciones extremas. Se trata de un total de 14 proyectos financiados mayoritariamente por el FDI (5) y FONDEF (5), aunque el FONTEC y el FIA también se hacen presentes con dos proyectos cada uno. El nivel tecnológico ambiental exhibido por los proyectos, de acuerdo a los criterios utilizados en este estudio, los localiza en los cuatro niveles de acuerdo a la siguiente estructura: Un proyecto en el nivel Punta, tres en el nivel Avanzado, 9 en el nivel Normal y uno en el Básico. 

5.1.9. Protección del Hábitat Urbano

Se trata de una categoría sin proyectos. La ausencia de proyectos en esta área es consistente con la ausencia de instrumentos de gestión ambiental urbana disponibles y en aplicación. Es un área que requiere de un fuerte apoyo para su desarrollo. 

5.1.10. Fortalecimiento Institucional

Se trata de la categoría con más proyectos (37). Cubre por sí sola el 24% de los proyectos seleccionados como ambientales. Independientemente de su propósito inicial, estos proyectos tienden a mejorar la capacidad instalada nacional para enfrentar el desarrollo de proyectos y acciones ambientales, tanto a nivel privado como público. Abarca los cuatro niveles tecnológicos definidos y cubre  los tres Fondos más importantes, de acuerdo a la siguiente repartición: FONDEF 20, FONTEC 9 y FDI 8. 

Se trata de la categoría con mayor número de proyectos en el nivel Punta (7), compuesta por aquellos proyectos orientados al fortalecimiento de la capacidad de certificación en materias ambientales y al desarrollo de tecnología. Asimismo, cuenta con un gran número de proyectos en el nivel Avanzado (16), que agrupa a aquellos proyectos de instalación de capacidad de análisis. Un buen número de proyectos se adscriben al nivel Normal (10), que reúne a aquellos que se relacionan con la generación y distribución de información base, materia de suma importancia en lo que se refiere a la instalación de la gestión ambiental a nivel país. La capacitación es el objetivo de cuatro proyectos, lo que los adscribe al nivel tecnológico Básico, demostrando que existen áreas productivas o temáticas en las que la gestión ambiental está en niveles muy incipientes. 
 

5.2. Por Análisis de Encuestas a Jefes de Proyecto 

5.2.1. Metodología

Se seleccionaron treinta proyectos financiados por los cuatro Fondos más importantes, asignando a cada uno un número de proyectos proporcional a su presencia en el listado de proyectos ambientales seleccionado. El criterio de selección utilizado fue el que las categorías de selección estuvieran cubiertas con al menos un proyecto. 

A la fecha de término del presente estudio, sólo fueron respondidos 18 cuestionarios, pese a la reiterada insistencia a través de e-mail, fax y contacto telefónico, más el apoyo de los encargados de los Fondos para apurar y completar el proceso de recolección de las encuestas. 

5.2.2. Análisis de los Resultados

El uso de los conceptos alto, medio, bajo, sin impacto, nulo, no sabe, etc. se ofrecía en la encuesta, con lo cual se disminuyó de manera importante la arbitrariedad de los jefes de proyecto al contestar. Por otra parte, la naturaleza misma de la encuesta obliga a ciertas concesiones en materia de metodología de evaluación. 

5.2.2.1. Estado de Avance

La muestra incluyó proyectos en distintos estados de avance. La mayoría de ellos (10) se encontraban terminados o estaban finalizando. Sólo cuatro se encontraban en pleno desarrollo, mientras que el resto (4) estaban iniciándose. Esta última situación, sumado a un nivel de respuesta, algo bajo (60%), hace que algunas de las conclusiones, particularmente aquellas referidas al grado de participación de agentes nacionales y respecto a las externalidades provocadas por los proyectos deban ser tomadas con cierta cautela. 

5.2.2.2. Impacto Observado o Esperado

La mayoría de los proyectos (11) espera u observa un impacto alto o medio-alto. Sólo dos proyectos observan o esperan impactos bajos o nulos. El resto espera u observa impactos medios. Respecto de dos proyectos, cabe alguna reflexión adicional. El primero de ellos se refiere al proyecto de INTEC-Chile titulado "Apoyo a la gestión Medio Ambiental de la PYME a través del Fortalecimiento de la Oferta", el cual condiciona su impacto a la difusión que tenga el proyecto. El segundo caso particular se refiere al proyecto de Birdwatching, ejecutado por Fantástico Sur Ltda., que entendió la pregunta respecto al impacto en relación al impacto ambiental sobre las comunidades de aves observadas, producto de lo cual contestó que el proyecto no tenía impactos. Es imaginable que el impacto es claramente positivo y así se consigna en las tablas correspondientes. 

5.2.2.3. Replicabilidad

La mayoría de los encargados de proyecto considera que sus proyectos tienen replicabilidad. Sólo uno de ello considera que no es replicable, lo que parece razonable por cuanto se trata de un proyecto que ha sido superado tecnológicamente (Sistema de Información Geográfica para PC). Dos proyectos no saben acerca de la replicabilidad porque sus proyectos no han finalizado, y uno la condiciona a restricciones institucionales del organismo ejecutor, INFOR, en este caso. 

En general, la replicabilidad de los proyectos considerados ambientales de acuerdo a los criterios desarrollados en el presente estudio es un antecedente muy valioso, por cuanto permite vislumbrar el efecto multiplicador de los Fondos. 

5.2.2.4. Origen de las Tecnologías

Ocho encargados de proyecto declararan que las tecnologías utilizadas en sus proyectos provienen del extranjero. Sólo uno de ellos declara que las tecnologías incorporadas a su proyecto son de carácter nacional. El resto, vale decir, nueve proyectos, incorporan una mezcla de tecnologías nacionales y extranjeras. A priori, se podría haber esperado, dado el corto tiempo desde la instalación del tema ambiental en Chile, que predominaran mayoritariamente las tecnologías ambientales de carácter internacional. Resulta muy interesante el alto porcentaje de proyectos que incorporan tecnologías nacionales. 

5.2.2.5. Valor Agregado por los Agentes Nacionales

Complementariamente al punto anterior, 10 proyectos declaran haber incorporado un alto valor agregado nacional a los proyectos. Cinco de los encargados de proyecto considera que el valor agregado por los agentes nacionales es medio, y sólo uno considera que es bajo. El resto (2), o no los conoce aún o no contesta la pregunta. 

5.2.2.6. Difusión

La difusión de los proyectos aparece sistemáticamente como un objetivo de los proyectos. Consecuentemente, aparece como un producto calificado como alto por el 45 % de los encuestados. Sólo tres encargados de proyecto consideraron que sus proyectos tenían baja difusión. El resto no la conoce aún por el estado de desarrollo del proyecto. 

En todo caso, este punto que a priori se podría considerar ligado al impacto del proyecto, no aparece así en las encuestas. En efecto, sólo dos de los proyectos tienen alto impacto y alta difusión. En el resto se producen combinaciones variadas de bajo y alto impacto con alta y baja difusión. 

5.2.2.7. Externalidades

Las externalidades de los proyectos son consideradas altas en la gran mayoría de los proyectos. Sólo uno de ellos considera que han sido bajas. Estas involucran, de acuerdo a las respuestas de los cuestionarios, a investigadores, consultores, empresarios e instituciones. 

5.2.2.8. Nuevas Oportunidades

En esta área se les preguntaba a los encargados de proyecto respecto de nuevas oportunidades en tres ámbitos (tecnológico ambiental, económico, institucional del Fondo). Se consideró que se abren muchas nuevas oportunidades cuando se contestaba positivamente en los tres ámbitos. En ese contexto, en sólo uno de ellos se consideró que no se abren, lo cual es explicable porque se trata de un proyecto dedicado a la evaluación de políticas, cuyo responsable no consideró que se abrieran oportunidades en el ámbito tecnológico ambiental ni en el económico. En el último ámbito concluyó acerca del proyecto y no del Fondo. 

5.3. Por Efecto (directo/indirecto) y Contingencia (corto/mediano/largo plazo) 

De acuerdo a los criterios esbozados en el capítulo 2 de este informe, a continuación se establece qué proyectos son calificados como relevantes. 

Se puede concluir de este cuadro que sólo un número reducido de proyectos aparece como "muy relevante" (9). El mayor número de proyectos se percibe como "relevantes" y como "moderadamente relevantes". En las categorías de "muy relevantes" han quedado proyectos de Fortalecimiento Institucional y de instalación de capacidad de tratamiento de efluentes y residuos en plazos cortos, que comienzan a mejorar la capacidad de gestión ambiental en el país desde su inicio. En la categoría de "relevantes" han sido asignados proyectos relacionados con el desarrollo de estudios para la puesta en marcha de cultivos de especies hidrobiológicas, proyectos de fortalecimiento institucional de mediano plazo, de desarrollo o adaptación de tecnologías ambientales, etc. Finalmente, los proyectos designados como "moderadamente relevantes" se refieren a proyectos de re-introducción de especies cuyos resultados se podrán conocer sólo después de cinco años,  estudios de política de recursos,  estudios de factibilidad, etc.

6. CONCLUSIÓN

Se ha logrado identificar un aporte real de los Fondos Tecnológicos a la gestión ambiental nacional a través de los proyectos financiados. El aporte es diverso en cuanto a las áreas cubiertas y en lo relativo a los niveles de “modernidad” de sus enfoques. Las áreas identificadas abarcan el uso de los medios (agua, aire, suelo) , la gestión de los recursos naturales (forestales, agrícolas, pesqueros y mineros) , el fortalecimiento institucional y la gestión de residuos. 

Para ello se ha construido una matriz conceptual de doble entrada, diseñada y estrictamente basada en la concepción hoy en día vigente en materia de gestión ambiental y de recursos naturales en Chile, de modo tal que aplicada a proyectos tecnológicos permitió establecer: 

1. Si tienen componente ambiental; y 

2. Qué área de la gestión ambiental es predominante en esos proyectos. 

Utilizando esta matriz se ha concluido que menos del 15% de los más de 1.100 proyectos analizados -financiados por los Fondos Tecnológicos- podría definirse como ambientales o como proyectos que incorporan aspectos ambientales. 

Resulta difícil entregar una explicación para esta situación. Sin información respecto a la representación relativa de otras áreas no es posible adjudicarle a los proyectos calificados como ambientales una baja o alta representatividad en el total. La única cifra que se puede manejar y que podría servir como elemento de comparación, se refiere al número de estudios financiados por CONAMA desde 1991-92 hasta 1998. Ese valor es de alrededor de 140 estudios por un total de aproximadamente U$ 30 millones . 

Otras áreas presentes en los Fondos podrían analizarse a través de matrices homólogas, a fin de poder realizar comparaciones metodológicamente más validas. 

En cuanto a la representación por categorías de proyectos, salta a la vista que las áreas más representadas son las de Recursos Naturales, lo que podría explicarse por el propósito de algunos Fondos de apoyar a algunos institutos CORFO como el CIREN y el INFOR, lo que sesgaría la asignación de recursos hacia esas áreas, al menos desde 1995. 

Se debe destacar también la ausencia de proyectos relacionados con la protección del hábitat urbano, componente hoy en día muy relevante en la gestión ambiental en Chile. 

Por último, en lo que se refiere a la relevancia de los proyectos identificados como ambientales, desde el punto de vista de su contingencia y de su repercusión en la gestión ambiental nacional, se concluye -considerando a los proyectos en su conjunto y sin discriminar por contingencia- que la mayoría de los proyectos tienen efectos directos (70%). De manera general, la mayoría de los proyectos (68%) se considera que tendrán efectos en el mediano plazo, sin discriminar por efectos. 

Por otra parte, cada uno de los Fondos analizados ha financiado proyectos de carácter ambiental, aunque en proporciones distintas. Destacan el FONTEC y el FONDEF, lo cual no es extraño, ya que se trata de los Fondos que más proyectos aportan al listado original. Sin embargo, si se analizan las participaciones relativas de los Fondos en el listado original de los proyectos (1143 proyectos), versus su participación en el listado de proyectos ambientales, se puede ver que el FDI y el FONDEF son los dos Fondos que más proyectos ambientales aportan en relación a su participación en los listados originales, desde un 6.6 a un 20.1% y desde un 18 a un 32.1 %, respectivamente. 

Por otra parte, también se concluye que los Fondos cubren aspectos significativos de la gestión ambiental, ya que más del 60% de los proyectos se asigna a niveles de Punta o Avanzados de las áreas ambientales identificadas. En el extremo opuesto, menos del 7% toca aspectos considerados básicos en gestión ambiental.