Sistema Regional de Innovación: VI Región

Introducción

  • Este resumen ejecutivo presenta los principales resultados del estudio sobre el Sistema Regional de Innovación (SRI) de la Sexta Región, encargado por el Programa de Innovación Tecnológica del Ministerio de Economía.
  • El estudio fue desarrollado entre los meses de julio y octubre de 1998 por la empresa consultora Asesorías Estratégicas Ltda. El equipo de trabajo estuvo compuesto por la socióloga Cecilia Montero S. y el sociólogo Pablo Morris K.
Objetivo del Estudio 

Diagnosticar e impulsar el aprovechamiento de las capacidades y habilidades institucionales disponibles en cada región, para concebir y materializar iniciativas que impliquen innovaciones de productos, procesos y formas de gestión en las empresas y servicios que operan en la región, buscando hacer conciencia de las oportunidades de colaboración que podrían aprovecharse en el corto plazo, con mutuos beneficios para quienes participen en iniciativas comunes. 

Marco Conceptual  

El contexto general en el cual se inserta y entiende el interés por la innovación en nuestro país, tiene que ver con el modelo de crecimiento existente y con las posibilidades de incrementar su competitividad, en el marco de una economía cada vez más globalizada. Desde esta perspectiva, un desafío central es prever posibles dificultades del modelo y anticiparse a ellas, para otorgar una mayor estabilidad y solidez a la inserción chilena en los mercados internacionales. 
En este sentido, la innovación tecnológica es entendida como un proceso social sistémico que contempla la concepción, oferta y difusión de nuevos servicios, productos, procesos de producción y formas de gestión, y que aprovecha (o no), para ello, la infraestructura tecnológica existente. Por ello, para efectos de este proyecto, lo que interesa es la dimensión colectiva y sistémica de la innovación -más que en las empresas individuales-,  y los factores de contexto que facilitan o retardan el cambio tecnológico. El énfasis, entonces, estuvo  orientado a indagar en las situaciones o Focos de Innovación Tecnológica (FIT) regionales. 

La eficacia de los procesos de absorción de tecnología extranjera, de creación nacional de tecnología o de difusión tecnológica, está determinada por una multiplicidad de agentes sociales e instituciones que influyen decisivamente en la velocidad y en el potencial de aprendizaje de los actores involucrados. Asimismo, abundante evidencia empírica respalda sólidamente la importancia de la dimensión local-regional en los esfuezos innovativos de las naciones, factor conceptualizado como Sistemas Regionales de Innovación Tecnológica, los cuales aquí son definidos como el conjunto de redes de agentes públicos, privados y educacionales que interactúan en un territorio específico, aprovechando una infraestructura institucional particular, para los propósitos de adaptar, generar y/o difundir tecnología. Así, los sistemas tecnológicos se definen en términos de conocimiento o flujos de competencia, más que como flujos de bienes y servicios comunes. Ellos consisten, pues, de conocimiento dinámico y de redes de competencia" . 

Siguiendo esta línea de reflexión, el desempeño de un sistema tecnológico depende del funcionamiento de las partes que lo componen, pero, sobre todo, de la manera en que ellas están interconectadas. El tema de fondo, entonces, ya no es cómo fortalecer a los actores aislados, sino cómo fortalecer el sistema en su conjunto, como apertura de posibilidades de innovación y de creación de oportunidades futuras. El potenciamiento de los sistemas regionales de innovación puede, por lo tanto, operar como catalizador  del desarrollo local o regional, al generar efectos sinérgicos desde "redes virtuosas". 
 
Metodología  

Para cumplir con el objetivo del estudio, los consultores diseñaron una metodología orientada a detectar las redes de innovación regionales, procedimiento que constó de cuatro fases: 

1. Una caracterización general de la región en cuanto a su perfil económico-productivo, su situación social, los programas de fomento productivo, de fomento a la innovación tecnológica que involucren a instituciones de la región y la oferta de organismos de educación y capacitación. Esta información fue recogida sobre la  base del análisis de datos secundarios, complementada con entrevistas a actores públicos y privados relevantes en la toma de decisiones a nivel regional. 

2. Un estudio de 7 focos de innovación tecnológica (FIT) significativos para la región. Al interior de estos FIT se realizaron entrevistas con personas que ocupan puestos directivos, las cuales fueron acompañadas, en algunos casos, de visitas en terreno para conocer los niveles tecnológicos de las plantas o instalaciones respectivas. 

3. Un taller de visión estratégica orientado tanto a realizar un balance FODA del sistema regional de innovación como a validar los resultados obtenidos en las fases anteriores, con representantes de su sistema de toma de decisiones. 

4. A fin de complementar esta visión de conjunto, se diseñó un cuestionario que fue respondido por 20 personas que ocupan puestos estratégicos en la región. Los resultados de la encuesta sirvieron para describir las redes de actores regionales, con los problemas y potencialidades que ellas presentan. 
 

Caracterización General de la Región:

A partir de los datos secundarios analizados, se desprenden las siguientes características que permiten describir la Sexta Región del Libertador B. O'Higgins: 

Una Región Predominantemente Agrícola 

La Región del Libertador en los últimos años ha estado marcada por el desarrollo de un sector agroindustrial muy dinámico. A partir de 1992, la participación del sector silvoagropecuario en el PIB regional ha superado a la del área minera, tradicionalmente predominante. 
La clave para el crecimiento del sector agrícola ha sido la modernización de empresas dedicadas a cultivos tradicionales, o sin mayor procesamiento, las cuales han aumentado el valor agregado de sus productos mediante la introducción de tecnología de punta a los procesos productivos. 

Un Tejido Productivo Compuesto de Microempresas 
Según datos de 1993, del total de empresas que existían en la VI Región (23.032), un 86% eran microempresas, alrededor de un 12% eran empresas pequeñas y un sólo un 2% eran empresas medianas o grandes  . 

Una Tasa de Crecimiento Insuficiente 
Pese a contar con el mineral de cobre subterráneo más grande del mundo, y a pesar del enorme auge del sector agroindustrial exportador, el PIB de la Región del Libertador sólo creció de 169,21 mil millones de pesos en 1985 a 293,82 mil millones en 1996  , lo que significó un incremento de un 74%, bastante inferior al 111% nacional. 

Un Nivel de Desocupación Levemente Inferior al Promedio Nacional 
La Región de O’Higgins terminó 1997 con una tasa de desocupación de un 3,6%, lo que significó un avance con respecto al 5,0% con que terminó 1996 y al 4,6% de 1995. Sin embargo, según la estimación del INE para el trimestre junio-agosto de 1998, la desocupación ha vuelto a elevarse hasta un 5,1%. 

Una Pequeña Disminución de la Pobreza e Indigencia 
La VI Región, desde el punto de vista de sus indicadores sociales, presenta una situación de leve mejoría  respecto de 1990, pero de retroceso en relación a 1992. El número de indigentes, que se había reducido de 96.060 a 47.291 hacia 1994, volvió a crecer hasta 66.179. A su vez, el número de pobres no indigentes, que había disminuido de 177.040 a 161.492, se elevó a las 176.602 personas. 

Nivel Educacional: Analfabetismo Elevado y Baja Escolaridad 
Según datos de 1994, la región tenía la tercera mayor tasa de analfabetismo en el país, sólo superada por la VII y la IX regiones. En la Región del Libertador 8,57 de cada 100 personas eran analfabetas, bastante más que el promedio nacional de 5,4 por 100. 
Por su parte, en 1993 la escolaridad de los habitantes de la Región del Libertador era de 8,11 años de estudio, menos que el promedio nacional de 9,38 años. Sin embargo, la brecha entre región y país se ha reducido en los últimos años, como se refleja en el ascenso de la región desde el último lugar, en 1988, al noveno en 1993, dentro del ranking de las regiones según niveles de escolaridad. 

Una Inversión Pública con Altibajos 
En la VI Región, la inversión pública casi se cuadruplicó entre 1988 y 1994, pasando de $8.900.000.000 a  $34.400.000.000. Sin embargo, en el último año se aprecia un descenso producto del cual la participación de la región en la inversión pública total disminuyó de un 6% a un 5%. 

Una Región sin Centros Científico-tecnológicos 
La Región del Libertador, junto con la décimo primera región, es la única que no registró ningún centro científico-tecnológico en el “Directorio Nacional de Centros Científicos y Tecnológicos 1997”, editado por el Programa de Innovación Tecnológica  . Además, las carreras ofrecidas por los centros de educación superior actualmente existentes no están muy ligada a las demandas del aparato productivo regional. 
Frente a este hecho, entre algunos actores locales se ha generado en los últimos años una corriente de opinión tendiente a subsanar una falencia que es vista como grave: la inexistencia de una universidad regional. 

Una Oferta de Capacitación Insuficiente 
El porcentaje de utilización de la franquicia SENCE en la región es bajo en comparación al promedio nacional. Sólo el 4,6% de los ocupados y un 5,6% de los trabajadores dependientes fueron capacitados durante 1996. 
El perfil de los cursos impartidos es muy similar al nacional, sin presentar ninguna particularidad ligada a las demandas productivas de la región. Los cursos pertenecen mayoritariamente al área de ciencias y técnicas aplicadas y administración. 

Apoyo a la Innovación Tecnológica 
Existen variadas iniciativas y proyectos de innovación en desarrollo en la VI Región. Sin embargo, no existe una capacidad instalada propia que se haga cargo de tales iniciativas. En FONDEF (1992 y 1993) no hubo ningún proyecto ejecutado por alguna institución de la sexta región  . De los 6 proyectos FDI que tienen impacto en la región, 5 son llevados a cabo por instituciones de la Región Metropolitana, y el restante, por una de la V Región. De 12 proyectos FIA, sólo 3 son ejecutados desde la sexta región. 
Sólo los proyectos FONTEC han experimentado un alza importante, pasando de 4 realizados en 1997 a 14 en este año. Todos ellos son ejecutados por empresas de la región, aunque con el apoyo de centros universitarios y de investigación externos a ella.  
 

Fortalezas y Debilidades para la Innovación

Desafíos de la Región: 
En función del panorama regional antes descrito, se estableció que los principales desafíos productivos que enfrenta actualmente la región -frente a los cuales debiera plantearse un sistema regional de innovación exitoso- son: 
  • Consolidar la industria agroexportadora.
  • Generar complejos productivos, impulsando el desarrollo de proveedores locales.
  • Promover innovaciones que eleven la productividad y la calidad, para competir en mejores condiciones en los mercados externos.
Además, existe un desafío social ineludible de equidad, que apunta fundamentalmente a disminuir la situación de marginalidad de ciertas áreas geográficas. De particular importancia resulta aquí: 

La integración de la zona del secano costero al desarrollo regional. 

Los desafíos de la región se determinaron a partir de la caracterización inicial de la región. Luego, fueron validados en un taller de visión estratégica que se explica a continuación. 

Visión Estratégica: la Región Soñada 
El día 28 de septiembre de 1998, en el salón de actos de la Gobernación Provincial de Colchagua, ubicada en San Fernando, se realizó el taller de visión estratégica para hacer el balance FODA del sistema regional de innovación de la VI Región. Asistieron 18 actores regionales (públicos, privados y educacionales), a quienes se hizo llegar previamente un breve documento sobre la situación regional vista por los consultores, con el fin de motivar la discusión. La metodología empleada fue de tipo participativo. 

El punto de partida para detectar fortalezas y debilidades fue imaginarse el horizonte deseado para la región al año 2010, señalando las principales características de dicha visión. Los resultados de este ejercicio se presentan en el siguiente cuadro: 

 
En función del horizonte deseado, los participantes en el taller comenzaron determinando las fortalezas y debilidades del hoy derivadas de la historia regional, y, luego, observaron hacia el horizonte soñado, detectando las principales amenazas y oportunidades que puede enfrentar la región, tomando en cuenta los potenciales obstáculos y las habilidades de que se dispone para enfrentarlos. 

CUADRO 2: FORTALEZAS, OPORTUNIDADES, DEBILIDADES Y AMENAZAS PARA LA INNOVACIÓN 
REGIÓN DEL LIBERTADOR 
  
 
  • Es interesante observar cómo varios elementos aparecen simultáneamente en casilleros distintos, lo cual implica reconocer que la región como tal no es un “producto terminado”, sino más bien una “obra en construcción” que puede seguir múltiples caminos y cursos de acción.
  • Por ejemplo, CODELCO aparece simultáneamente como una fortaleza, como amenaza y como oportunidad para la región. La falta de una universidad regional aparece como debilidad, pero existe también la oportunidad de aprovechar la existencia de varias sedes regionales universitarias. Y la vocación exportadora de la región, que es vista como una fortaleza, lleva implícita la amenaza de una caída de los mercados externos y el consiguiente aumento del desempleo.
  • Aparte de los factores ya mencionados, para alcanzar el “horizonte regional 2010” se observan como oportunidades algunos planes y programas ya previstos en la legislación e institucionalidad actualmente vigentes (reforma educacional, regulación ambiental y renovación de los planos reguladores). Por su parte, las principales amenazas son la llegada de factores contaminantes de Santiago, el agotamiento del mineral El Teniente, la caída de los mercados externos, el aumento del desempleo (ya nombrados) y la desconfianza entre los actores regionales.
  • La senda que efectivamente recorra la Región del Libertador dependerá de las decisiones que sus propios actores adopten: si crean redes de colaboración o actúan individualmente, si crean una visión común o se orientan por intereses particulares, si se limitan a mantener la situación en que se encuentran o definitivamente innovan. Este es el futuro que se encuentra abierto y, por ende,  los escenarios los construirá la misma región.

Focos de Innovación Tecnológica

  • En el contexto antes señalado se detectaron algunos focos de innovación tecnológica (FIT) en la región, los cuales fueron validados en el taller de visión estratégica enunciado. Por FIT entenderemos a aquellas situaciones en las cuales un grupo o red de actores ha generado alguna innovación tecnológica que puede tener un efecto dinamizador de la actividad económica,  y que genera sinergias hacia la región en su conjunto
  • Los focos de innovación pueden ser relevantes para la región, ya sea por el nivel de inversión tecnológica que implican; por su importancia a escala nacional o supranacional; los cambios y el valor agregado en productos, procesos productivos y/o gestión; o por el mejoramiento del capital humano local que ellos gatillan.
Focos de Innovación: Potencial de Desarrollo Futuro 
  • Los FIT estudiados son sólo casos que ejemplifican la manera en que opera el sistema regional de innovación; por lo tanto, ellos están expuestos, en general, a las mismas oportunidades y amenazas que enfrenta éste. Sin embargo, cada uno de ellos en particular tienen también sus propias fortalezas y debilidades -con respecto a su potencial de desarrollo futuro.
CUADRO 3: FORTALEZAS Y DEBILIDADES DE LOS FOCOS DE INNOVACIÓN TECNOLÓGICA (FIT)
 

Redes Regionales  de Actores

  • La descripción de las redes regionales de actores se hizo sobre la base de un cuestionario aplicado a una muestra intencional integrada por 20 personas que ocupan puestos directivos dentro del sector público, privado y educacional de la Región del Libertador (9 públicos, 7 privados, 3 educacionales y 1 municipal). 
  • Los principales resultados del cuestionario son los siguientes:
  • 1. Existe una red densa de actores públicos y otra algo menos densa de actores educacionales (donde un número significativo corresponde a centros universitarios externos a la región). 
    2. La red de actores privados es menos densa en relación a la “red total” de los actores de la región. Sin embargo, internamente existen fuertes conexiones entre privados. 
    3. La red claramente más débil es la de los municipios, cuyo ámbito de acción -al igual que lo que ocurre a escala nacional-  parece estar reducido a lo local, sin posibilidades de incidir sobre el desarrollo regional. 
    4. Las instituciones ligadas a la innovación y al fomento productivo (CORFO, SERCOTEC, COPEVAL) tienen un alto índice de conectividad, lo cual es una clara señal de que son un buen canal para potenciar y difundir procesos de innovación. 
    5. Sin embargo, dicha red no está vinculada sistemáticamente con el área productiva de la región, lo que produce desfases entre ambas mallas. 

    Los desafíos pendientes de la región, para fortalecer sus redes, son básicamente tres: 

    1. Integrar mejor las iniciativas del sector público con las del sector privado. 
    2. Para fortalecer las redes es clave generar nuevos espacios de encuentro y conocimiento entre los actores regionales, amén de potenciar los ya existentes, dando a estos espacios un cierto grado de influencia sobre las políticas y el devenir regional general. 
    3. Las instituciones educacionales aparecen como las que tienen mayores potencialidades a futuro para servir como base para un SRI potente e integrador de todos los actores regionales. 
    4. En el sector público, es necesario elevar la conectividad de los organismos públicos ligados al área agrícola (INIA, INDAP, SAG, CONAF), a objeto de aumentar la eficacia de su acción. 

Conclusiones y Sugerencias

 1. Un sistema regional de innovación (SRI) está constituido por dos elementos fundamentales: una cierta infraestructura tecnológica y una cultura de la innovación. En este estudio, partiendo del primer nivel (lo que existe), se ha pretendido avanzar hacia la comprensión del segundo nivel (lo que subyace). 
2. Desde el punto de vista de su infraestructura tecnológica, los consultores han podido observar los siguientes aspectos en la Región del Libertador: 
  • Existe un conjunto amplio de plantas e instalaciones industriales modernas.
  • La red de comunicaciones viales (caminos y carreteras) se encuentra en buen estado, apreciándose bastante impulso a la pavimentación de nuevas rutas.
  • Hay dificultades para las telecomunicaciones en zonas rurales, por ejemplo, en el valle de Colchagua, lo cual entorpece la conectividad expedita de dichas zonas con otras áreas geográficas (vía fax, teléfono o e-mail).
  • La oferta educacional de nivel superior y de capacitación es aún insuficiente (falta de universidad regional), aunque se observa un dinamismo incipiente en las sedes universitarias regionales.
  • Hay una notoria desarticulación entre la oferta y la demanda de capacitación.
  • En el ámbito de la transferencia  tecnológica se desarrollan iniciativas públicas (INDAP) y privadas (Malloa, Nieto), pero con pocos nexos entre sí.
  • Se desarrolla una importante actividad de fomento por parte de los actores públicos (CORFO, SERCOTEC), al tiempo que  existe un sector privado con actitud de colaboración (COPEVAL).
 3. Con respecto a la cultura regional de la innovación, puede concluirse lo siguiente:
  • En las medianas y grandes empresas existe un empresariado especialmente innovador, compuesto de jóvenes profesionales ubicados a nivel de mandos medios. 
  • En el caso de la pequeña y mediana empresa privada no existe la innovación como una actitud generalizada, aunque hay algunos casos que escapan a esta tendencia (por ejemplo, certificación de calidad). 
  • Hay notorias carencias en la articulación público/privada. Existe una densa red de actores públicos y otra de actores privados, pero no existen puentes entre ambas mallas.
  • Entre las grandes empresas privadas que generan innovación de punta y los actores públicos hay poca comunicación, lo cual es una barrera a la difusión regional de la innovación.
  • La Región del Libertador es una región activa, con eventos de alta convocatoria (Foro de Desarrollo Productivo, Aniversario SERCOTEC, Encuentro Regional de Innovación, Seminario Visión Regional, etc.). Sin embargo, se percibe una falta de participación de los actores municipales y de las grandes empresas privadas.
4. Dentro del cuadro antes esbozado, los consultores detectaron algunos focos de innovación tecnológica potencialmente capaces de generar sinergias regionales a distintos niveles. Sus principales características en común son:
  • Visión estratégica (son pioneros en sus ámbitos).
  • Potencial de desarrollo futuro (en su negocio principal).
  • Fuerte integración en su territorio (con o sin apoyo público).
  • Innovación que puede trascender a la región (oportunidad de exportación de know-how).
  • Posibilidad de incrementar sinergias, a base de una  mayor articulación entre ellos.
5. Un soporte fundamental para un sistema regional de innovación dinámico, incluyendo el fortalecimiento de los focos detectados, son las redes que se establecen entre los diferentes actores –públicos, privados, educacionales y municipales- de la zona. En este estudio se ha considerado que las redes pueden adquirir cinco formas diferentes:
    a) Red tipo estrella: red horizontal, pero con un centro claramente definido, en torno del cual se van configurando el resto de las relaciones. Al deshacerse el nudo central, se desarma toda la red. Puede tratarse de una red muy potente y virtuosa, pero altamente dependiente de un solo actor.

    b) Red de distribución: se asemeja al modelo del “chorreo económico”. A partir de un punto más “virtuoso” que el resto se produce una acumulación tal de conocimiento, que éste tiende a desbordar “hacia abajo”. La difusión tecnológica, en este caso, sólo ocurre bajo la forma de una externalidad.

    c) Red tipo árbol: la red se inicia en un punto determinado (“tronco”), desde el cual se van ramificando nuevas sub-redes. Las redes más pequeñas están situadas lejos del tronco principal, pero, aunque nacieron de él, no dependen de él para prolongarse como clusters hacia adelante: toda “rama” puede convertirse potencialmente en “tronco” para otras ramas.

    d) Red tipo malla: su principal característica es la horizontalidad y la ausencia de centros claros. Potencialmente todos pueden estar relacionados con todos. Pero de allí deriva también su debilidad: es muy difícil establecer visiones de futuro compartidas entre todos los actores.

    e) Red tipo polo: A diferencia de las redes tipo árbol, aquí el “tronco” y las “ramas” siempre permanecen como tales y resulta muy difícil intercambiar ambas posiciones. Desde un “punto virtuoso” de la red se van integrando puntos lejanos y débiles, que reciben los beneficios de ligarse al polo, pero que, al mismo tiempo, están en una posición subordinada a éste, de la cual es muy costoso salirse. 

6. En relación a la forma de las redes regionales de innovación en la Región del Libertador, se observa:

  • Una amplia red tipo malla en el sector público, cuyos mayores puntos de densidad están dados por las conexiones entre los mismos actores públicos.
  • Una combinación de múltiples redes tipo estrella, generadas en torno a las grandes empresas privadas regionales. Este conjunto de redes tiene una elevada densidad interna, pero se diluye al colocarlo dentro de la totalidad de redes existentes entre los diferentes actores de la región. En su conjunto, presenta una baja interconexión con la red del sector público.
  • Existe una red de actores educacionales, la cual debiera potenciarse para fortalecer el SRI. Esta red, al interior de la región, tiene la forma de una malla, más equilibrada que la malla de actores públicos (tienen una conectividad más homogénea con los diferentes tipos de actores). Sin embargo, la mayoría de los actores educacionales de la región son externos a ella, o bien, se trata de  sedes de otras instituciones. Por ello, con respecto a Santiago, se trata de una red polo, con perspectivas de irse convirtiendo en una red árbol.
  • La red de actores municipales es la más débil y, dado la forma de sus conexiones, puede ser vista como la parte dependiente dentro de una red de distribución, donde el “distribuidor” principal son el Estado y el gobierno regional.
7. A modo de síntesis, y considerando todos los puntos mencionados, se puede señalar que los principales desafíos que enfrenta actualmente la Región del Libertador en materias de innovación, para alcanzar el “Horizonte 2010” soñado por los actores regionales, son:
  • Capitalizar la inversión tecnológica realizada.
  • Socializar los logros conseguidos.
  • Distribuir los beneficios generados.
8. Esto se podría traducir en medidas concretas, como, por ejemplo:
  • Promover la denominación de origen para los productos de la región. Vale decir, que el hecho de provenir de la VI Región, sea garantía de calidad.
  • Fomentar  la identidad regional y el desarrollo de una imagen corporativa, de manera de  contribuir a acrecentar el flujo turístico.
  • Avanzar hacia un desarrollo de proveedores de "segunda generación”, que no sólo produzcan insumos, sino también servicios de apoyo.
  • Mejorar la información y estimular la asociatividad de los pequeños productores para aprovechar su potencial de desarrollo propio (por ejemplo, vía Profo).
  • Socializar la innovación que realiza el sector privado hacia todo el tejido social.
  • Generar iniciativas de reconocimiento a los innovadores de la región (becas, incubadoras de ideas, premios, etc.).
  • Publicar un directorio regional de who is who en el ámbito de la innovación (similar a la cartografía cultural de Chile del MINEDUC).
  • Aprovechar el know-how de la mano de obra calificada de El Teniente para las sedes universitarias regionales e INACAP.
  • Aprovechar la cercanía a Santiago para la difusión y transferencia de tecnologías a otras regiones (intercambio y consultorías entre regiones).
  • Establecer puentes entre redes de actores públicos y privados, tomando como grupo de apoyo a los profesionales jóvenes que se desempeñan en ambos sectores.