El desafío de Chile es disponer de un sistema de investigación de excelencia vinculado a las necesidades actuales y potenciales del país. Además, promover activamente la colaboración y vinculación con el sector productivo. Para ello, se han generado programas y fondos de financiamiento.

CONICYT

Dentro del conjunto de programas que esta institución posee, se destacan cuatro que apoyan las actividades de I+D vinculadas directamente a los desafíos de competitividad del país:

1. Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDEF)
2. Programa Regional
3. Programa de Equipamiento Mayor
4. Programa de Financiamiento Basal

1. Fondo de Fomento al Desarrollo Científico y Tecnológico
El FONDEF tiene como principal propósito vincular el sector científico y tecnológico con el empresarial. Fue creado en 1992, con el objetivo de fortalecer y aprovechar las capacidades de innovación científica y tecnológica de las universidades e instituciones de investigación y desarrollo nacionales, financiando proyectos de alta calidad, significación e impacto, para mejorar la productividad y competitividad de los principales sectores de la economía.
A través de sus programas regulares y temáticos, FONDEF financia proyectos de investigación y desarrollo (I+D) con un fuerte componente de investigación y posterior aplicación en las áreas definidas por el propio organismo. También financia proyectos orientados a crear negocios tecnológicos relevantes por su impacto económico-social, los que deben estar orientados a su incorporación temprana en el sector productivo, en forma de nuevos productos, servicios o procesos.

2. Programa regional
El Programa Regional de CONICYT , creado en el año 2000, es una instancia de descentralización del desarrollo científico y tecnológico del país, desde una perspectiva geográfica e institucional.
Este programa articula la actividad científica, tecnológica y de innovación en las regiones, con excepción de la Región Metropolitana, orientada a las necesidades de la respectiva región en áreas temáticas relevantes para su desarrollo económico y social, conforme a prioridades establecidas por el correspondiente gobierno regional.
A través del programa regional, CONICYT ha creado instrumentos de financiamiento para la creación, fortalecimiento y continuidad de Centros Regionales de Investigación Científica y Tecnológica. Hasta el 2009, los centros son 11, y han potenciado a las regiones donde se encuentran tanto en el ámbito científico como en el de desarrollo de capital humano avanzado. Así se ha logrado, junto con el progreso de la ciencia, el de la propia región.

3. Programa de equipamiento científico mayor de uso compartido
CONICYT entiende que para realizar ciencia de alto nivel es tan importante el factor humano como la infraestructura. Por ello, creó el Programa de Equipamiento Científico Mayor de Uso Compartido, cuyo objetivo es contar con mejores capacidades e infraestructura para realizar investigación y desarrollo de excelencia en el país. El plan está diseñado para la adquisición, mantención y uso eficiente de equipamiento científico de frontera. A fines del año 2009 se realizará el primer concurso piloto para la creación de Centros que administrarán este tipo de infraestructura y asegurarán su disponibilidad para toda la comunidad científica.

4. Programa de Financiamiento Basal
En el año 2009 el Gobierno de Chile, a través de CONICYT, adjudicó fondos para cinco centros científicos de excelencia, que se suman a los 8 centros adjudicados previamente en el primer concurso realizado en 2008. Estos centros reciben recursos por períodos de 5 años, prorrogables por una vez, hasta por otros 5 años, de manera de crear las condiciones para formar masas críticas de científicos de alto nivel, que le permitan a Chile estar en la frontera del conocimiento en áreas específicas.

Iniciativa Científica Milenio

La Iniciativa Científica Milenio (ICM) es una entidad gubernamental inserta en el Ministerio de Planificación y Cooperación (Mideplan), cuyo objetivo principal es fomentar el desarrollo de la investigación científica y tecnológica de frontera en el país, factor clave del desarrollo económico y social sustentable a largo plazo. La ICM financia la creación y el desarrollo de centros de investigación - Institutos y Núcleos Milenio – los que son adjudicados a través de concursos públicos, por sus méritos científicos.

InnovaChile

La principal agencia pública abocada al apoyo del emprendimiento innovador y la transferencia tecnológica es InnovaChile, de CORFO. Para las empresas existentes, InnovaChile posibilita el uso de incentivos tributarios a la inversión en I+D, y apoya el fortalecimiento de capacidades de I+D en regiones así como el desarrollo de consorcios tecnológicos formados por distintos actores del sistema, incluyendo empresas, universidades y centros de investigación.

Fundación para la Innovación Agraria

La Fundación para la Innovación Agraria (FIA), en su rol de agencia de fomento a la innovación agraria del Ministerio de Agricultura, centra su quehacer en impulsar los procesos de innovación y en actuar sobre el entorno y condiciones que los favorecen. Todo ello a través del financiamiento de iniciativas, generación de estrategias, transferencia de información y resultados de proyectos y programas innovadores.

Consorcios tecnológicos empresariales

Con el objetivo de estimular programas colaborativos entre centros de investigación y los sectores productivos, se han instaurado los Consorcios Tecnológicos Empresariales, que hasta el 2009 suman 24, cuentan con una inversión público–privada de $67 mil millones y tienen apoyo de una agencia gubernamental: InnovaChile, CONICYT y FIA. Además, participan 25 universidades nacionales y más de 100 empresas chilenas y extranjeras.

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La Política de Innovación identifica cuatro áreas transversales que han sido destacadas como condiciones habilitadoras para la innovación:

• Biotecnología.
• Recursos hídricos y medio ambiente.
• Tecnologías de la información y comunicación (TIC).
• Energías renovables no convencionales, biocombustibles y eficiencia energética.

Se busca respaldar y fortalecer la actividad desarrollada por grupos de investigadores de excelencia en estas disciplinas, fomentando la vinculación entre la investigación científica y tecnológica de alto nivel y la competitividad de los sectores prioritarios.

¿Hacia dónde vamos?
El desafío de esta línea es disponer de un sistema de investigación de excelencia vinculado a las necesidades actuales y potenciales del país, crecientemente conectado con el mundo y en donde se promueva activamente la colaboración y vinculación con el sector productivo.

1. Completando una red de centros y capacidades de excelencia para abordar los desafíos de competitividad generados por los clusters y sus áreas transversales estratégicas.

Para el año 2010 se espera contar con 12 nuevos Centros de Excelencia. De ellos, cinco serán Centros de Excelencia Internacional que trabajarán activamente con las capacidades locales, dando respuesta a las necesidades de la economía.
Se considera también la creación de al menos tres centros de equipamiento mayor de uso compartido, disponibles para toda la comunidad científica, cerrando así brechas de equipamiento.

Se espera la configuración de un programa de investigación asociativa que articule los principales programas de financiamiento del sistema: el de Financiamiento Basal, el Fondo de Financiamiento de Centros de Excelencia en Investigación (FONDAP) y el Programa Bicentenario de Ciencia y Tecnología (PBCT) que permita mejorar la coordinación de los distintos instrumentos y focalizar los esfuerzos.

2. Estimular programas colaborativos entre centros de investigación y la industria, que permitan responder activamente a las necesidades de los sectores productivos.
Se espera consolidar el modelo de consorcios tecnológicos para crear otros nuevos y apoyar la continuidad de los ya existentes.

Ley 20.241 de Incentivos Tributarios a la Inversión Privada en I+D.

El 19 de enero de 2008 fue publicada la Ley N° 20.241, que establece incentivos tributarios a la inversión privada en investigación y desarrollo (I+D).

La iniciativa es un poderoso incentivo para estimular la inversión en I+D en Chile. La ley establece para los contribuyentes de la primera categoría de la Ley de la Renta (es decir, sólo para empresas), que declaren su renta efectiva determinada según contabilidad completa, un crédito contra el impuesto de primera categoría del ejercicio, equivalente al 35% del total de los pagos en dinero efectuados conforme a los contratos de investigación y desarrollo debidamente certificados por CORFO, aun cuando las actividades de investigación o desarrollo realizadas en virtud de dichos contratos de investigación y desarrollo no se relacionen directamente con su giro.

El monto del crédito a que tendrá derecho el contribuyente en cada ejercicio no podrá exceder de un 15% de su ingreso bruto anual determinado de conformidad a lo dispuesto en el Art. 29 de la Ley de la Renta, ni el equivalente a cinco mil unidades tributarias mensuales, de acuerdo al valor de dicha unidad al término del ejercicio.

Para acceder al beneficio tributario las empresas deberán suscribir contratos de Investigación con los Centros de Investigación acreditados por CORFO, por montos superiores al equivalente a 100 UTM al momento de su celebración.