Industria suma adeptos en Chile:

Crowdfunding, una novedosa forma para financiar proyectos o start-ups

¿Qué tienen en común la famosa Estatua de la Libertad, la cantante chilena Camila Moreno o Edward Snowden, el estadounidense que divulgó un programa de vigilancia de Agencia Nacional de Seguridad? Los une una plataforma de financiamiento colectivo, que cada día suma adeptos en el país.

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Fernanda Vicente, directora de Inittia: "En Chile hay un problema cultural que impide el crecimiento que se quisiera de las plataformas dedicadas al crowdfunding".

En el caso de la centenaria estatua, el crowdfunding se manifestó con la iniciativa de financiamiento colectivo en 1884, cuando el comité encargado de su construcción se quedó sin fondos para levantar el pedestal. A través de un periódico se hizo un llamado a donar, convocatoria que logró recaudar US$100.000 de la época, aporte realizado por 125.000 personas. La historia de Edward Snowden, ex-asistente técnico de la CIA de 29 años es muy diferente: tras refugiarse hace pocas semanas en Hong-Kong para evitar su extradición a Estados Unidos por revelar el Plan PRISM, apareció una campaña de crowdfunding en el sitio Crowdtilt, que busca ayudar a este personaje que develó secretos de inteligencia porque “su coraje debe ser recompensado”. A su vez, la artista nacional, a través de la plataforma regional Idea.me recaudó los $5.035.900 que necesitaba para terminar la realización de su último trabajo, que incluía los costos de los arreglos finales en Nueva York.

Pero más allá de estos casos puntuales, el crowdfunding se ha posicionado con fuerza como una eficaz manera de financiamiento colectivo para emprendimientos y proyectos de toda índole. Utilizando la misma lógica que tiene la recordada ‘vaca’ que se ha usado en toda época para solventar los gastos de una determinada iniciativa, el crowdfunding aprovecha las nuevas tecnologías para que este proceso tenga una escala mayor y se expanda al círculo familiar o de amigos del interesado.

A nivel global, la mayor participación de iniciativas de crowdfunding están radicadas en Estados Unidos, de donde es Kickstarter, la plataforma más reconocida del mundo y en Europa, mercados que acaparan cerca del 95% de los fondos recaudados por este sistema. Según datos de la consultora Massolution, el sistema crowdfunding cuenta con más de 450 plataformas a nivel mundial y año pasado movilizó US$ 2.700 millones en más de un millón de iniciativas ligadas en su mayoría a proyectos sociales, además de negocios, emprendimientos y actividades culturales como películas, teatro o música.

Constanza Anguita, directora de Contenidos y Estudios de la Asociación de Emprendedores de Chile (Asech), cuenta que la industria del crowdfunding crecerá en un 300% este año, adjudicando más de 6 billones de dólares a proyectos alrededor del mundo. Dice que el crowdfunding permite a las ideas que no encajan en los patrones requeridos por los inversionistas convencionales, obtener financiamiento a través del apoyo y la solidaridad de sus potenciales clientes.

EL CROWDFUNDING EN CHILE

En nuestro país el avance ha sido importante, aunque todavía existe un amplio margen para avanzar porque a diferencia del primer mundo, acá todavía no se ha posicionado como un método reconocido y masivo para apoyar iniciativas, proyectos y emprendimientos. Fernanda Vicente, directora de Inittia, cuenta a Innovación.cl que en Chile hay un problema cultural que impide el crecimiento que se quisiera de las plataformas dedicadas al crowdfunding. Dice que por eso, las diversas plataformas existentes en el país, han tenido dificultades para que todos sus proyectos consigan los recursos que necesitan. “Basta recordar lo que sucede todos los años con la Teletón, donde los cuestionamientos a los aportes entregados son sujetos a cuestionamientos. Además, la gente no está acostumbrada a que le pidan entregar dinero sin mayor explicación”.

Idea.me es una plataforma regional que ocupa cerca del 70% de las transacciones de crowdfunding en América Latina. Hasta la fecha, ha sido el puente para financiar 293 proyectos en la región bajo la premisa que los sueños se hacen realidad gracias al financiamiento colectivo. Así, reúne en la misma plataforma a emprendedores que necesitan ayuda financiera para concretar un proyecto y a los colaboradores que están dispuestos a apoyarlos. Plataforma que presenta 19 categorías de proyectos para ser solventados

Para ilustrar cómo funciona, basta ver el ejemplo de la cantante nacional Camila Moreno, quien aprovechó Idea.me para financiar los arreglos de su último disco, invitando a los contribuyentes a ser parte del trabajo musical. Exitosa iniciativa, en la que 221 colaboradores reunieron los $5.035.900 que necesitaba para mezclar y masterizar los temas. En la plataforma la cantante ofrece una amplia gama de retribuciones: desde un e-mail con un video de agradecimiento de la artista a quienes aporten $2.518, hasta un recital íntimo con amigos en la propia casa, a quienes hayan aportado $1.510.770, pasando por una gama intermedia de aportes y gratificaciones.

Cristián Martínez, gerente general de Idea.me, cuenta a Innovación.cl que durante 2012, se recaudaron US$ 800.000 a través del crowdfunding en Latinomérica, de los cuales US$ 640.000 se obtuvieron a través de Idea.me. “Partimos en forma simultánea en Chile y Argentina con proyectos importantes en ambos países y se abrió también la oficina en Chile, idea que no formaba parte del plan original”.

Cuenta Martínez que el modelo de negocio de Idea.me se basa en el cobro de la comisión del 5% del total recaudado. Tienen dos modelos de recaudación: el habitual, que se denomina ‘todo suma’, en el que si la persona que busca financiamiento pide 100 y no lo obtiene, al final del camino no se lleva nada, tampoco se le cobra comisión y las colaboraciones se devuelven a quienes aportaron. “Esta manera de funcionar se debe a que si alguien busca recursos para una determinada iniciativa y el dinero recaudado no alcanza para financiar lo que se pretendía, uno no le estaría diciendo la verdad a la gente que puso el dinero pensando en que, efectivamente, el dinero iba a solventar lo que se dijo desde un comienzo. Todo en aras de la transparencia, que en negocios como éste es fundamental”. Con la posibilidad abierta a que el proyecto vuelva a ser presentado.

PARTICIPACIÓN EN EL PROYECTO
Utilizando el método de participación en los emprendimientos que apoya, Broota.com en el corto tiempo de vida que lleva, se ha constituido en la primera plataforma de crowdfunding de este tipo en el país. Su Co-founder, José Antonio Berríos, cuenta a Innovación.cl que ya tienen 900 usuarios registrados y que en este breve lapso han promovido cinco proyectos, de los cuales uno ya obtuvo el financiamiento requerido: Cerveza Guayacán, producción artesanal del Valle del Elqui, que reunió los $68.000.000 que necesitaba para la producción de sus cuatro tipos de cerveza.

La política de Cobros de Broota.com determina que al inversionista se le cobra un 2,5% de comisión por el monto de su inversión, lo que se debe sumar un cobro adicional de 3% como costo transaccional online. Al emprendedor le cobran un monto fijo de $250.000 por subir un proyecto a la plataforma y el 5% del monto solicitado sólo en caso de éxito. Explica Berríos que “la existencia de este tipo de plataformas promueve la aparición de nuevos emprendimientos, potencia la inversión en regiones y el ingreso de capitales extranjeros al país”.

A su vez, Fernanda Vicente cuenta que Inittia partió con la idea de entregar recompensas por los aportes que pueda recibir cada proyecto, pero que en el camino se dieron cuenta que nuestro país no tiene la misma predisposición cultural de Estados Unidos para que este tipo de iniciativas prospere y escale rápidamente. Considerando estas dificultades, esta emprendedora cuenta que Inittia se ha enfocado en ser una plataforma que conecte y de visibilidad a los proyectos, a la espera que la industria nacional madure y tome al crowdfunding como una opción real de financiamiento. Mientras tanto, cuenta que su otro proyecto de crowdfunding, 101 Monkeys, está enfocado en el mejoramiento de la calidad educación en cientos de escuelas rurales a lo largo del país. Idea que califica como crowdfunding social, que sí da cuenta de la forma de ser de los chilenos, no muy dada a confiarle sus recursos a cualquiera. Es por eso que se invita a las empresas a que participen y cooperen con estas escuelas y que reciban algo a cambio. “Cada proyecto esta apadrinado por una empresa, la cual nos donará un producto, un beneficio o un descuento, el que será traspasado a cada donador. De esta manera, no sólo estarán realizando una donación, si no que también recibirán un beneficio a cambio”, señala.

Sea con el método que fuere, no hay dudas que el crowdfunding vino para quedarse. La duda es la rapidez con la que entre en el ecosistema nacional. Según Constanza Anguita su gran virtud es que, a diferencia de los inversionistas, los colaboradores no exigen resultados rápidos. “Si alguien colabora con un proyecto a través de crowdfunding, es porque confía en su potencial. Por lo mismo, al hacerse parte del proyecto, hará todo lo posible porque este tenga éxito”.

LAS 4 MANERAS DE HACER CROWDFUNDING

  • Aportes basados en acciones o participaciones. El colaborador, a cambio de su inversión, recibe acciones de una compañía. Si la compañía va bien, el inversor obtendrá sus beneficios.
  • Préstamos. Una persona da dinero a un proyecto y su recompensa es recuperar esa cuantía económica. Aparte de recuperar el dinero prestado, este tipo de crowdfunding incluye algún tipo de interés, para que los que aportaron obtengan algo más de lo que prestó.
  • Recompensas. Acá, las recompensas pueden ser de cualquier tipo: merchandising de una película, la utilización de un servicio en concreto, agradecer públicamente la participación, etc.
  • Donaciones. Es la donación de dinero para una causa en concreto, normalmente solidaria, sin esperar ninguna recompensa a cambio.

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