COOPERACIÓN  
CENTROS TECNOLÓGICOS NACIONALES
La red Chilena

De los más de 160 centros tecnológicos que existen a lo largo del país, casi la mitad están ubicados en la Región Metropolitana. Junto a esta fuerte centralización, un catastro realizado por el Programa de Innovación Tecnológica del Ministerio de Economía detectó que existe una escasa especialización de los centros de regiones en las áreas económicas de sus respectivas zonas.


En Chile existen más de 160 centros científico-tecnológicos, en los cuales trabajan casi siete mil personas. De ellos, la mitad fueron creados en los últimos 15 años, y el 15% en el último quinquenio. Estos constituyen el núcleo central de la Infraestructura Tecnológica Nacional, pero hasta hace poco no se conocía ni su extensión, ni sus especialidades, ni tampoco su distribución territorial.

Es por ello que el Ministerio de Economía, a través de la Secretaría Ejecutiva del Programa de Innovación Tecnológica (PIT), hizo un primer catastro que intentó reconocer todos los institutos o centro científico-tecnológicos del país.

El estudio mencionado consistió en la aplicación de una encuesta enviada a un amplio conjunto de centros de distinta naturaleza, desde departamentos e institutos universitarios, institutos tecnológicos públicos, hasta organismos no gubernamentales, entre otros. La encuesta fue enviada por correo y autoadministrada, por lo que la información recogida corresponde sólo a los Centros Científico-Tecnológicos (CCT) que voluntariamente la respondieron.

Aun así, el estudio tuvo una importante cobertura, incluyendo a centros de investigación científico-tecnológica tanto del sector público como privado, lo que permitió individualizar y caracterizar los centros y laboratorios de investigación del país, al mismo tiempo que identificar las principales actividades y la oferta tecnológica de estas instituciones.

Gonzalo Herrera, nuevo Secretario Ejecutivo del PIT, explica que el esfuerzo permitió conocer algunas características importantes de la red de centros que existe en el país. Sin embargo, reconoce que es un catastro incompleto, dado que la información solicitada no exigía respuesta obligatoria, razón por la cual será perfeccionado durante 1998. En cuanto a la información obtenida, será colocada en la Red Innovación del Ministerio de Economía en Internet, procedimiento que no sólo permitirá entregar información al público sino también transformarla en un instrumento de actualización permanente.

En todo caso, la información recogida ha sido sistematizada en una publicación de próxima aparición, la cual tiene dos propósitos. Por un lado, proporcionar un servicio al sector productivo nacional al dar a conocer la oferta de servicios tecnológicos básicos y avanzados disponibles en el país. Por otro, contribuir a la elaboración de la política tecnológica, al disponer de un conocimiento cabal de las actividades de investigación, desarrollo y transferencia científico-tecnológica que potencialmente están al servicio de las empresas en Chile.

Concentración y escasa especialización

La distribución a lo largo del país de los CCT reunidos en este directorio presenta al menos dos características relevantes. En primer lugar, existe una altísima concentración de estos centros en determinadas regiones del país. Es el caso de la Región Metropolitana, donde se ubica más del 44% de estos centros. Más notable aún es el caso de la X Región, en la que se encuentra el 12,5% del total de centros, particularmente concentrados en la ciudad de Valdivia.

En el extremo opuesto, otras regiones carecen casi absolutamente de CCT, como es el caso de las Regiones III, VI y XI. Este fenómeno de concentración en determinadas zonas se vincula fuertemente con la presencia y el dinamismo de Universidades Regionales, que constituyen la base de los sistemas regionales de investigación, desarrollo y transferencia tecnológica.

El segundo hecho relevante que surge del análisis de los CCT por regiones es la escasa especialización de los centros en las actividades económicas propias de sus respectivas regiones. Si bien los CCT orientados a la minería son más frecuentes en el norte del país, y aquellos que se especializan en actividades forestales se localizan preferentemente en las regiones del centro-sur, estos énfasis no son muy marcados.

En los CCT agrupados en este directorio existe una importante capacidad tecnológica, expresada en los recursos humanos presentes en éstos. En cada CCT hay en promedio cinco doctores y cinco profesionales con el grado de magister, aun cuando no todos ellos tienen una dedicación completa a sus centros respectivos. En todo caso, si se considera sólo al personal de los CCT con algún grado universitario (doctores, magisters y licenciados), éstos componen casi el 50% del total de científicos e investigadores estimados por Conicyt para 1995.

La distribución de los CCT según su antigüedad es significativa. Entre la década de los cuarenta y la de los sesenta, la creación neta de centros que subsisten hasta nuestros días se incrementó sustantivamente, coincidiendo con una fuerte expansión de la educación universitaria en Chile. En la década de los setenta, en cambio, este crecimiento se detuvo bruscamente creándose, en promedio, menos de un CCT cada año. A partir de la década de los ochenta se retoma el impulso anterior, fundándose entre 1980 y 1995 casi la mitad de los CCT actualmente en funcionamiento que registra este directorio.

El grado de vinculación de los CCT con el sector productivo puede ser enfocado a través del análisis de sus diferentes fuentes de financiamiento. En promedio, el 40% del financiamiento total de los centros proviene de sus "instituciones madres" (principalmente universidades). Un porcentaje similar (casi el 36%) proviene de las interacciones directas que establece el CCT con empresas o instituciones públicas y privadas, bajo la forma de venta de servicios de carácter tecnológico o de asistencia técnica. Aunque no se dispone de información histórica al respecto, parece probable que esta proporción haya experimentado incrementos a lo largo de los últimos años. Finalmente, un porcentaje no despreciable del financiamiento de los CCT proviene de los diferentes mecanismos diseñados por el Estado para incentivar la actividad científico-tecnológica, como es el caso de Fondecyt, Fondef, FDI (ex-Fonsip), FIA, FIM, FIP e incluso el FNRD.

El Parque Tecnológico de la Universidad de Chile

Un importante avance en la configuración y el diseño organizacional de los centros tecnológicos será el Parque Tecnológico de la Universidad de Chile.

A 20 kilómetros del centro de Santiago se ubicará un proyecto pionero que concentrará centros tecnológicos, empresas innovadoras y facultades de ciencias, todo ello en un marco de interacción y sinergia que -al igual que cientos de experiencias similares en el mundo- augura sólo éxitos.

Un documento oficial de la Fundación Valle Lo Aguirre, institución especialmente creada para desarrollar el proyecto, explica: "La idea central apunta a propiciar la innovación y el desarrollo tecnológico, favoreciendo la sinergia empresarial y la difusión y asimilación de tecnología, gracias a un acercamiento progresivo entre industrias, centros tecnológicos, universidades y empresas de servicios; desarrollar tareas formativas de carácter avanzado, adecuadas a las necesidades que una sociedad moderna demanda, y hacer realidad en el largo plazo las relaciones universidad-empresa, tantas veces vistas como inalcanzables al creer que pertenecen a mundos diferentes".

El Parque Tecnológico de la U. de Chile estará ubicado en el sector de Laguna Carén, en el Valle de Lo Aguirre, en 1.011 hectáreas donadas por el Gobierno de Chile en 1994. La primera parte del proyecto contempla unas 200 hectáreas para el parque tecnológico propiamente tal, es decir, centros de investigación públicos y privados y empresas. Unas 500 hectáreas se poblarán con infraestructura académica y de formación científica exclusivamente de la Universidad. Otras 200 hectáreas se dedicarán a la creación de un parque público.

Tomás Guendelmann Bedrack, jefe técnico del proyecto, ve el panorama futuro con gran optimismo: "Este es el proyecto más importante de la Universidad para el próximo siglo", señala. Con un título de ingeniero civil de la U. de Chile y una maestría en ciencias de la Universidad de Berkeley, California, Tomás Guendelmann está profundamente involucrado con el proyecto desde la Dirección de Planificación de la Rectoría. Hoy, y aunque el proyecto global es encabezado por el Dr. Patricio Rojas, presidente de la Fundación Lo Aguirre, a Guendelmann le cabe enorme responsabilidad de que el parque se construya, pueble, empiece a funcionar y se gestione.

"Los primeros centros tecnológicos de la Universidad que poblarán este Parque serán decididos por las autoridades pertinentes, aunque mi punto de vista personal es que los idóneos serían el Instituto de Investigación y de Ensayo de Materiales, el INTA, la Facultad de Ciencias y los del complejo Antu Mapu".

Respecto a las empresas, Guendelmann asegura que ya hay interesadas, principalmente de países europeos. "Responden al perfil establecido: son de alta tecnología, con permanente búsqueda de innovación y no contaminantes. Hablo de fibras ópticas, dispositivos electrónicos, productos farmacológicos y minería limpia".

Ejemplos exitosos de parques tecnológicos en el mundo (también hay grandes fracasos, pero pasaron al olvido) son el Triangle Park de Carolina del Norte y el Silicon Valley de California, ambos en EE.UU. También está el de Lovaina, en Bélgica.

 
Revista Correo de la Innovación.
Copyright © 1997
DISTRIBUCIÓN REGIONAL Y ESPECIALIZACIÓN SECTORIAL
REGIÓN Número Centros Científico - Tecnológicos % Especialización sectorial
I 6 3,8% Ciencias básicas; ingenierías.
II 10 6,3% Minería; acuicultura.
III 1 0,6% -
IV 5 3,1% Ciencias básicas; pesca.
V 14 8,8% Ingenierías; pesca.
VI 0 - -
VII 6 3,8% Fruticultura; forestal.
VIII 19 11,9% Agropecuaria.
IX 6 3,8% Ciencias básicas; ingenierías.
X 20 12,5% Forestal; pesca; agropecuaria.
XI 0 - -
XII 2 1,3% Energía.
R.M. 71 44,4% Multisectorial.
TOTAL 160 100%

 

¿DE DÓNDE PROCEDEN LOS INGRESOS DE LOS CCT?
FUENTES DE FINANCIAMIENTO PARTICIPACIÓN
Organismo del cual depende el CCT 40,2%
Organismos públicos 16%
Organismos internacionales 4%
Venta de servicios y transferencias tecnológicas 35,9%
Otros aportes 4%
TOTAL 100%

 

Definiciones empleadas en el catastro

  • Centro Científico Tecnológico (CCT): Es toda institución que organiza y ejecuta en forma permanente actividades científico-tecnológicas bajo su propia dirección y responsabilidad, sin perjuicio de la observación de normas generales emanadas del organismo del que pueda formar parte, o en coordinación con otras dependencias del mismo.

  • Actividades científico-tecnológicas: Conjunto de acciones que implican I+D científico-tecnológica, en conjunto con actividades de difusión (documentación, provisión de servicios tecnológicos, transferencia y otros), formación de recursos humanos (superior de postgrado, universitaria de pregrado, superior no universitaria de pregrado y técnica especializada) y actividades de apoyo (recolección sistemática de datos científicos tecnológicos, metrología y otros).

  • Personal Total de un CCT: Comprende a todo el personal que pertenece al centro cualquiera sea su función. Incluye personal científico-tecnológico investigador, técnicos (bibliotecarios, operadores y/o encargados del mantenimiento de equipos en general y mano de obra calificada) y auxiliares (administrativos, secretarias, etc.). El personal total contenido en las fichas incluye tanto las jornadas parciales como las jornadas completas. La desagregación en doctores, magister y licenciados, en cambio, sólo comprende las jornadas completas.

 

¿QUIÉN TRABAJA EN LOS CCT?
Personal(jornadas completas + parciales) Número
Doctores 799
Magister 832
Licenciados 1.542
Ayudantes 679
Técnicos 1.279
Auxiliares 1.649
TOTAL 6.780