Quiénes somos Contacto Preguntas frecuentes Regístrate Login
Versión para impresión

Síguenos en

RSS de innovacion.cl

La Responsabilidad Social Empresarial tradicional ha muerto

Imagen de Ángel Morales
Ángel Morales

Director de Alianzas Internacionales. Fundación América Solidaria

El pasado 27 de septiembre se realizó en Madrid el Primer Foro Internacional sobre el impacto de la acción social empresarial.

Una de las principales conclusiones que se extrajeron fue que "el debate ahora no está en si hacerlo (RSE), sino en cómo hacerlo". En este sentido, el principio del “valor compartido” ha cobrado gran fuerza, puesto que hoy los entendidos en la materia aseguran que la creación de valor económico debe generar también valor social. A su vez, tenemos que en España se están generando programas “respaldados por la Comisión Europea para desarrollar modelos de negocio innovadores que den respuesta a retos sociales”.

La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) como se entiende hoy está quedando obsoleta. Solo algunos adelantados en estos temas en Chile ya están tomando nuevas líneas de acción para co-crear valor compartido junto a sus Stakeholders. Bienvenidos al futuro: la RSE evolucionará aceleradamente a su nuevo rostro, la Innovación Social Corporativa (ISC).

Pero ¿qué tiene la ISC qué no tiene la RSE? Veamos. Actualmente la participación ciudadana, está en plena evolución puesto que a las personas ya no sólo nos basta con votar para las elecciones y opinar en las encuestas, sino que queremos ser protagonistas de los cambios, y en lo particular, del Chile que viviremos en los próximos 30 años.

Es por esto que hoy la participación ciudadana se ha volcado al voluntariado y al involucramiento real en proyectos de impacto social a través de nuestros trabajos, negocios o iniciativas sin fines de lucro para contribuir a mejorar la calidad de vida de quienes habitan en contextos de pobreza. Lo mismo ocurre con la RSE, ya no es suficiente que salgan suculentos cheques desde las compañías o que los trabajadores de estas organizaciones salgan a plantar un árbol en una plaza o pinten una banca un barrio.

Lo que necesitamos hoy es algo más radical: co-creación de valor socio-económico compartido de manera intensiva con quienes se ven afectados directa o indirectamente por las operaciones de las empresas. En tal sentido, la ISC se presenta como una jugada audaz, disruptiva y potente para aquellas empresas que realmente estén preocupadas por este ámbito. La ISC es estratégica y vital a la hora de salir en búsqueda de pertenencia en el contexto social en el cual operan las empresas puesto que es una oportunidad idónea para recobrar el real sentido de una organización productiva en el Siglo XXI. ¿No lo creen?

Fecha : 
3 octubre, 2011